a más pesada, como una nube de tormenta a punto de estallar, Ricardo, ajeno o qu
círculo de sus socios de nego
s se rieron, "La encontré con un ala lastimada, incapaz de
s sobre mí, algunos con lástima, otros con burla, mi cara ardí
vamente a Mateo
ra una columna, observando la escena, no ha
de desprecio, levantó su vaso ligeramente, como si
remordimiento, sentía placer al verme as
un momento temí que se me escapara, pero
voz era casual pero firme, como si hablara con un
a orden, delante de todos s
dócil
o, Ri
sintiendo los ojos de todos en mi espalda
tenía que pasar justo
cuando pasé a su lado, habló, su voz era un s
contraste tu verdad
det
lví para
a los
tan calculado, que me dejó
que estaba haciendo esto por mi famili
no lo
lo miré a los ojos, mi rostro estaba
no había dolor
quedaba: mostrarle que sus p
spondí con una voz suave y controlada, "aunque
ojos, no esperaba que le respondie
í mi camino hacia la b
lágrimas amenazaban con salir, pero
osible, había aprendido que a veces, la mayor muestr
etrás de mí, un so
o ya no estaba allí, se había ido, dejando
iquiera darme las gracias
o, mientras por dentro, una par