es blancas de una clínica privada me rodearon
onrisa amable. "Su esposa
ó, con una expresión torpe en su ro
vitando mi mirada. "El médico dij
, que casi parecía una parodia. Se sentó en el borde de l
una disculpa. Se levantó y salió
í, mi amor... no, no te preocupes por mí... desca
riaba. El breve momento de "
, que alguien había dejado en la mesita
tás bien? El conductor me dijo que te llevaron d
oy en una clínica. Hubo... una complicación
tomar el primer
llí. En La Ri
ando Scarlett v
s?" preguntó, con u
ntí. "Quería sab
spués de todo, en su mundo
esitaba descansar, que mi corazón había sufrido un estrés consider
sas," le dije en cuan
habitación ahora
entos. Mi
leta estaba en un rincón, pero la ropa estaba tirada por el suelo, pisoteada, algunas prendas ro
so en el pasillo. Tenía mejor color,
ía, ¿sabes dónde estábamos? En una playa privada en Punta del Este. Ella ni siquiera leyó tus mensajes p
an inesperado, que sentí un impulso de violencia que nun
ite
pósito de la bodega, que estaba justo al lado. Una lámpara de aceite decorativa cayó al suelo, romp
ó Patrick, pre
a llenar el pas