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ojas de los árboles, antes uniformemente verdes, se transforman en una sinfonía de amarillos dorados, naranjas encendidos
decoran el lugar mencionado, y susurran a las hoj
cional, que fue haciéndose popular por los deliciosos productos que brindaban, desde bebidas de cafés hasta postres únicos del lugar. Detrás
, Yoo
dulce aroma agradaba a las flores. En sus manitos estaba posada una rosa roja que emanaba un rico olor.
equeño sonrojo bajo sus ojos. -¿Qu
spiró sin
or un momento se pensó que se quedaría en silencio de no ser porque golpeó su frente cont
! ¿¡Qué
acia el Omega, cerró sus ojos sua
Humm. P-perdí una apuest
-quedó bo
erdo mucho de lo que pasó, pero
ía ido a tomar junto con algunos amigos y ex compañeros
xistiera un tipo así? Era imposible no quedar hipnotizado con semejante h
idas se hubiera rendido e irse para su hoga
o se abundaran en su mente y en su corazón. El sudor y las espesas feromonas que recorrieron todo su cuerpo. La forma e
o aviso del Alfa que daban en temp
r en todo su cuerpo. Su voz grave se agudo al conta
fruncieron dando a entender que estaba muy molesto. Sacó de su bolsillo u
ado en estado de ebriedad-neg
icando que lo ayudes-suplicó junta
la mesa y alzó la voz: -¡Y yo...! ¡Ugh! Aun no e
o al agua. Soltó un sonido relajante como si hubiera disf
mpañía-apretó sus manos
oonpyo arq
dó
, esto sucedía cuando tanto Alfas como Omegas
cción que me pidió que lo encontrara e
o! -gritó m
lló, agregando
errar la cafetería, ya que mi tío no se encuentra desde aye
gustiado agarrando fuertemente
ame-intentó libe
erará de esto, no se lo diré para que no te regañé. Solo tiraré el
amigo el miedo, la angustia y
cuerdos de como lo defendió por ser solo un simple Omega nunca lo olvidaría, las veces en que estaba siempre sacándole una sonrisa en sus moment
te, debía admitirlo que le
s y soltó un suspiro moviendo
indó una pequeña
parte donde
ía muy tímido cuando lo halagaban o cuando le agradecían. Pero si venía
de veces las manos del Omega, provocando que sus m
contramos? -preguntó levantándose de
n por el callejón a una cuad
s oscuro» Pe
sita. -Pero que sea
preocupes-alz
an encima de la mesa, ya para voltearse Homin habló:
ntí un poco de fiebre, por eso estoy to
ste unos
to de pastillas. -Se me acabaron
risa. -Por nada, es
o miró con los oj
omin. -Entra, entra...-le dio un pequeño empu
fin a la cafetería, dejand
o y se alejó del lugar, tarareaba u
ueno que estes en
a no
de la noche por ser fin de semana y por las personas que salían tar
que su hermana no lo viera, es decir, anteriormente le dijo que se olvid
ón, h
metió al callejón donde se suponí
esta
nía que el que organiza la esc
bería estar más
astillas y tras sacar una, el sonido metálico lo interrumpió. Tembló y retro
s tú? -tartam
auma por los sonidos metálicos. La curiosidad y el miedo por el sonido se ap
romas, Homin. N
rpo actuó por impulso y quiso salir de ahí, pero chocó
spiro tembloroso y so
e-dio un pequeño gol
con un brillo oscuro
a tibia sangre cubrió mayor parte de su rostro, sus ojos se llenaron de lágrimas que
a carcajada. -¡Tengo que agr
ntón de Yoonpyo, lo que h
a de valor que of
r qué m-me...hace
ecesito que me ayudes siendo mi objeto de valor. Ser un
or favor
uridad y llamó a un par de hombre