anizar las reuniones de la semana, mantenía la mirada fija en la pantalla mientras trataba de ignorar la impone
asperación y alzó la vist
a adelante. "Estaba pensando en cómo alguien tan brillan
rle la última palabra. "Tal vez porque los
peligrosa, como si hubiera encontrado el desafío que
brió de golpe, revelando a Sofía, la compañera de oficina q
eferirías que te los trajera personalmente". Su tono era dulce, casi e
isa. "Gracias, Sofía. Puedes dejarlos
ás trabajo". Su sonrisa era una mezcla de in
arte de mi trabajo", respondió Amelia c
esado en observar el intercambio que en intervenir. "Si necesitas algo más, n
a", respondió Matías con tono profesiona
Sofía, Amelia soltó un suspir
ocionado.
resionada de que tenga tiempo para jugar a ser l
untó, recostándose en su silla con
o la incomodidad permaneció, una mezcla de tensión profesi
no
do atrás las reuniones interminables y las sonrisas falsas de Sofía, pe
llegó corriendo hacia ella, sus rizos castaños rebotando mientr
x, abrazando su peluche con una inocencia
todo el día para pelear. Ahora
nar?" preguntó Max con una sonrisa qu
tir", respondió Amelia, llevándolos a la mesa d
de preocupación y orgullo. "Te ves agot
espondió, sirviénd
Y
fería. "Matías sigue siendo... Matías.
stás manejand
horias en el plato. "Hago lo que puedo. Pero hay días en los que
s que decidir si le cuentas sobr
cómo reaccionaría. Matías es complicado, y no quier
insisti. Sabía que su
ina, al dí
ba en orden antes de que Matías llegara. Sin embargo, la tranquilidad de la
señorita... ¿A
da por la visita inesperada. "Buenos día
onder. "Quería hablar con mi hijo, pero parece q
e", respondió Amelia, mante
a la altura. Matías tiene
lo posible para asegurarme de
tiera como si estuviera bajo un microscopio. Antes de que pudiera decir alg
preguntó, lanzando una mirada
familia contigo", respondió Catalina,
giró hacia Amelia, alzand
ue su corazón seguía acelera
ervaba a Lía y Max dormir. Se sentía dividida entre la necesid
ecuerdos de lo que alguna vez compartieron. No podía nega
uró para sí misma.
ía que el pasado estaba cada