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Ella nunca imagino que amar sería su condena, la dulce enfermera se casó con él hombre perfecto, el mismo quien resultó ser un heredero de la mafia que necesitaba un hijo para tomar el poder, el mismo que al tener una niña la arrancó de sus brazos sumido en la desesperación logrando perder la batalla ante su monstruoso hermano y haciéndole perder la paz para siempre. Ahora ella es una belleza que aniquila sumida en el "Inframundo", casada con su ex cuñado y enemigo, cerca de su hija y dispuesta a todo por recuperarla incluyendo luchar con el deseo que el mafioso apodado Satán causa en ella.
ANTUAN
Los pasteles que decoran la mesa no pueden verse más deliciosos pero sí uno más grande que otro y eso no es raro.
Para mi mala suerte mi hermano y yo cumplimos años el mismo día, en mi pastel el cual es más pequeño está mi nombre Antuan y 11 velas mientras que el más grande tiene el nombre de Maximilian y el número 15 lo cual me deja claro lo que siempre he sabido desde que tengo uso de razón, mi hermano es el favorito, lo mejor siempre es para él, lo más grande y cualquier cosa que lo haga superior a mi y a todos porque esa ha sido la elección de mi padre.
Me quedo pendiente contando una y otra vez las velas, mi pastel es de chocolate con mucho fudge y frutos rojos que son mis favoritos mientras que la de Maximilian tiene dos pisos, es negra porque es su color favorito y tiene cosas doradas que la hacen ver cómo de revista más aún sabiendo que eso es oro comestible, oro para el rey, cualquier cosa para mí.
- Mi niño ¿No te ha gustado el pastel que prepare para ti? - escucho a mi Nana de toda la vida.
- El de Max es mejor, siempre todo lo que es para él es mejor, no quiero soplar las velas - corro a mi habitación sintiendo que no quiero llorar.
"Los hombres no lloran, tu hermano jamás lo hace, él es fuerte, grande y deberías ser como el"
- Mi niño ya se lo que estás pensando - interrumpe mi Nana. - Yo los amo a los dos, son los niños de la casa.
- ¡Mentira! - Quiero llorar pero no lo hago.
Maximilian no es ningún niño, él acaba de cumplir 15 años, ¿Acaso no sabes lo que significa?, papá vive orgulloso de él y siempre me compara con mi hermano, parece que no entiende que yo no elegí ser menor, que no quiero ser un malvado como mi hermano y que mucho menos quería que mi mamá muriera para darme la vida.
- !Yo no lo elegí! - lloro cuando la Nana me abraza y odio eso pero me siento mejor en sus brazos.
- ¿En serio estás llorando otra vez? - escuchamos la voz gruesa de mi hermano.
- Realmente no puedo creer cómo es que papá dice que le hubiese gustado tener una niña cuando tú ya estás aquí. - se burla como siempre.
- Max - lo regaña la Nana y yo me levanto limpiando mis lágrimas con tanta fuerza hasta que la piel me arde.
- No soy una niña - lo empujó y solo se burla de mí porque no lo muevo ni un poco.
- ¡No te quiero Max!, eres malo, papá y tú no me quieren, nunca me han querido.
- Definitivamente eres patético y una vergüenza para la familia.
Max no grita, no es necesario que lo haga porque su sola presencia hiere, es grande, tiene buen físico, es el futuro del mundo de mi familia, el consentido de mi padre, lo sabe y sabe cómo usarlo, en lugar de golpearme por gritarlo solo se sienta en el mueble como todo un ganador riéndose de mí y decir que el apellido Zerboni me queda muy grande.
- Yo no quiero ser como tú y por eso no me quieren. ¡Lárgate de mi habitación!
- Tu a mí no me das órdenes mocoso, deja de hacer el ridículo al menos en este día - se sigue riendo
- El problema no es que hayas jodido tanto para nacer que hasta mamá murió en eso, el jodido problema es que no has hecho nada por cambiar las cosas.
- Haré cambios, lo prometo, yo jamás he querido ser como tú, tenemos mundos diferentes y juro que nunca seré como tú si no mucho mejor.
- Tu estás entrenado para quitar cosas y te juro que yo las voy a salvar, tu vive en tu mundo que yo viviré en el mío, ¡Te odio!
- Lo dicho, no solo eres un mocoso ridículo y débil si no también imbécil, nadie, tenlo muy claro, nadie escapa de este mundo, si quieres ser un plebeyo es tu problema pero yo soy un rey, mejor que tú, que cualquiera y vive con eso Antuan.
Se rumoreaba que Fernanda, recién vuelta con su familia, no era más que una violenta pueblerina. Pero Fernanda se limitaba a esbozar una sonrisa despreciativa. Otro rumor sugería que Cristian, normalmente racional, había perdido el juicio, locamente enamorado de Fernanda. Esto la frustró. Podía tolerar los cotilleos sobre sí misma, ¡pero calumniar a su amado era pasarse de la raya! Poco a poco, a medida que salían a la luz las múltiples identidades de Fernanda como célebre diseñadora, experta jugadora, reconocida pintora y exitosa magnate de los negocios, todos se daban cuenta de que eran ellos quienes habían sido engañados.
Después de tres años de matrimonio hermético, Eliana nunca había visto a su enigmático esposo hasta que le entregaron los papeles del divorcio y se enteró de que su supuesto esposo estaba cortejando a otra mujer sin importarle cuánto le costara. Ella volvió a la realidad y decidió divorciarse. A partir de entonces, Eliana dio a conocer sus diversos personajes: estimada doctora, legendaria agente secreta, hacker reconocida, célebre diseñadora, experta piloto de carreras y distinguida científica. A medida que se conocieron sus diversos talentos, su exesposo fue consumido por el remordimiento. Desesperado, suplicó: "¡Eliana, dame otra oportunidad! Todas mis propiedades, incluso mi vida, son tuyas".
En opinión de todos, William se había casado con Renee bajo la presión. Ahora que su verdadero amor había vuelto embarazada, no podían esperar a que abandonara a Renee. Sorprendentemente, Renee fue sincera sobre la situación: "Para ser franca, soy yo la que pide el divorcio todos los días. Lo deseo incluso más que cualquiera de ustedes". Pero ellos ignoraron su comentario como un mísero intento de salvar las apariencias. Hasta que William hizo una declaración: "El divorcio está fuera de discusión. Cualquiera que difunda falsos rumores se enfrentará a consecuencias legales". Renee estaba confundida. ¿Qué planeaba hacer ahora este loco?
Eveline se casó con Shane, un obstetra, a la edad de 24 años. Dos años más tarde, cuando estaba embarazada de cinco meses, Shane abortó al bebé él mismo y procedió a divorciarse de ella. Fue durante estos tiempos oscuros que Eveline conoció a Derek. Él la trató con ternura y le dio el calor que nunca antes había sentido ella. También le causó el mayor dolor que jamás había tenido que soportar. Eveline solo se hizo más fuerte después de todo lo que experimentó, pero ¿podría soportar la verdad cuando finalmente se revelara? ¿Quién era Derek detrás de su carismática fachada? ¿Y qué haría Eveline una vez que descubriera la respuesta?
Elena, antes una heredera mimada, lo perdió todo de repente cuando la verdadera hija le tendió una trampa; su prometido la ridiculizó y sus padres adoptivos la echaron. Todos querían verla caer, pero ella desveló su verdadera identidad: heredera de una inmensa fortuna, famosa hacker, top diseñadora de joyas, autora secreta y doctora talentosa. Horrorizados por su glorioso regreso, sus padres adoptivos le exigieron la mitad de su nueva fortuna. Elena denunció su crueldad y se negó. Su ex le suplicó una segunda oportunidad, pero ella se burló: "¿Crees que te lo mereces?". Entonces, un poderoso magnate le propuso amablemente: "¿Puedes casarte conmigo?".
Jennifer Smith era la hija del Alfa. Su familia fue destruida por traidores que venían de dentro de su manada. Su madre murió de una enfermedad; su padre fue asesinado por el Beta; y su manada fue conquistada. Sola y encarcelada, Jennifer escapó para recurrir a la manada de Dark River, donde finalmente fue esclavizada. Aunque fue constantemente abusada e insultada, nunca se rindió ni admitió la derrota. Su pareja resultó ser Anthony Jones, el príncipe licántropo del reino de Osman. El reino de Osman gobernaba sobre todas las manadas. Pero el noble príncipe parecía tener su propio secreto. El gran poder de Jennifer atrajo al príncipe y la llevaron rápidamente al campo de entrenamiento real, donde su destino cambió para siempre. Hambrienta de venganza contra aquellos que destruyeron a su familia, Jennifer se concentró con todo el corazón en el entrenamiento. ¿El príncipe Anthony rechazaría a Jennifer por su humilde identidad? ¿Qué les pasaría en el campo de entrenamiento? ¿Qué elegiría ella entre el amor y el odio? ¿Y cuál era el secreto del príncipe?