tatuaje ayudaré a cuidar el alma. - El tono era suave, most

era p

o su irritación con el esposo. "Te lo prometí,

ente cubrirá el gastos. Ambos se volvieron haci

smo tiempo, dio un paso hacia el lado y Oton

onaba. - ¿Qué banda es esta? cuestioné quitándome la chaqueta mientras iba al otro lado d

e ver que era maleable. ¿Fue ese?¿mujeres? Margarita. - Es Manafest cantando Impossible. "Toma t

parte del tatuaje hecho el otro día por Oton y no sonreí

podía cambiar el pasado, pero trataría de dejarlo donde no lo hizo podía ver a menudo. Tomé el tubo con

encontré el mejor lugar para estar, él se echó atrás. Miedo a las alturas. Hasta ahora no

emostró que era más fuer

enía un lado positivo. si no estaba dispuesto

evedo. Socios ocultos de va

r la ciudad, fui víctima de l

mpo yaque mi hermana era cinco años menor que yo, quería venganza, tanto tendría que desaparecer. No pensé que Laerte Azevedo hiciera ese tipo de

amisa de vestir negra, la

convirtiendo en un hábito,

y así cruel como el padre. Mi madre exigió que la relación extramatrimonial de mi padre fue aniquilada, a cambio ella dejaría que mi vida fuera tocada

que estaba muy bien a

mente inteligente como para no me puso el apellido de mi madre, pero nada de eso paró mi restaurante para convertirse en

ar cualquiera que fuera

o estremecer. Ni siquiera necesitaba el mío sangre, aunque ese tema pesó mucho en mi decisión de ceder ante ellos caprichos de mi prima. Sin mi amigo Erik, casi perdiendo

esbelto, rozando la delgadez. El tatuador no quería contar la historia de cómo se conoci

se cruzaría en su camino. Empaqué una pequeña bolsa con ropa casual y de gimnasia, m

cansar mi cuerpo. Elegí un reloj, revisé

hasta mi ático dúplex

ión del hogar eran discre

o entré. Murmuré un saludo, tom

ba puesta para la comida de

o hasta el aparcamien

, tendría que guiar a mi

Marino. Conduciendo por la ciudad, ni siquiera me

canción. Revisé el título,

lenó el ambi

esto

ra sobrevivir no seré negado Soy un guerrero por dentro"

o, la única lucha era no e

a era una cosa surrealista de tocar. Al menos Er

tó el pago por cerra

uviera negociando la com

seguró de recalcar que d

on él, no habría vuelta

tacionamiento del sótan

staurante y subí al últi

de más disfrutaba estar. La

era donde me sentía bien. Saludé al pe

di órdenes al chef so

en la esquina enque a Laertes le gustaba sentarse y esperar.

Mi mirada se perdió entr

Éramos el edifcio más a

el restaurante

cuché la voz de La

n cinismo, me tendió l

e mi i

a demorar? Miré mi rel

limentarme. Revisé a los

iempre acompañaban a mi

hisky. "Lo vi sentarse en

de seguridad lo fanqueaban y s

nos. Podría llamar a uno de los emp

cerca de tanta sucieda

traía malos recuerdos,

nto. Menos mal que Erik

. Debe haber tardado demasiado, p

e habían aparecido y se hab

ido como todos los demás, p

si no supiera que todos los

n podridos. Los pelos blanco

todos los demás