LE
r lejos de papá, de Bruno, llegar a un departamento donde nadie me espere es triste. Extraño tener ab
les duran poco, su vida debe estar ocupada con la universidad. Paso así hasta q
haces
con unos proveedores de nuestro restaurante de a
l que me va cocinando, le muestro mis trabajos, estoy feliz. Nos besamos
día hacerlo sin ayuda
necesita un hombre. Tengo algo
sabe. Pasamos una gran tarde entre besos, risas y una película. Al fi
IMI
más diferentes con ese sujeto. Habla por su celular sin precaución, es otra chica, le miente, algo que seguramente hace con mi vecina también. Odio a los tipos
fuerza. Mi madre la ha llamado y no le ha dado chismes, a pesar de mi mala actitud me deja el desayuno en la puerta cuando sabe pasé una mala noche por
LE
onados y vivimos una rutina de pareja, lavando, eligiendo qué comer, viendo películas, durmiendo abraza
administración si lo
hef y mi papá quien administra, d
sueño, sabes que podías ser adm
mpañeros? T
conmigo – me detengo s
lo sería – lo m
¿S
venir el próximo semestre – me al
ya verás, serás m
s. Al final almorzamos en la cafetería, reconozco a Max, lo saludo haciéndole de la mano, él como siempre
ese tipo – no puedo
ino – luce
dian lo
untos – se me escapa una sonrisa, no puedo creer sien
a nuestra ciudad. ¿Te g
me e
moda con los demás
e mí – me río esperando que
ue sigue sin i
á, ¿
ame pagar la cuenta
quedas ha
cosas qu
o invito –
allero siempre deb
cualquier dama – le regalo un gu
o sé –
IMI
empo para encargarme de los asuntos de otro, ademá
acerlo, la lavandería está completamente llena, toca esperar, pelear por una máquina y rogar funcione.
dería con tu ropa
ojos en blanco mientras ríe, es
– me da una sonrisa triste así que acepto con mi cabe
ecorador profesional, es sencillo. Tiene algunas plantas, muchos libros, luces ad
e dice dejando las co
sta la f
a un álbum y me muestra algunas. Es muy buena, t
curo – cierro los ojos y me maldigo a
e aparta. - Se nota que no te gustan los abrazos, deberías acostumbrarte porque amo darlos – se aleja y abr
susurrarle en el oído, quiero lograr intimidarla – tengo u
no quiero me seduzcas – camina a su cocina y
así que ya nada, me rindo – la veo –
dice co
as a e
e enferme, estamos avan
ueda usar más tu lavadora – le
a amarme – pongo mis ojos en b
– inspecciono - no hay
cocinar – mue
tis, así que a cambio de usar tu lavadora, yo cocin
to co
digas
orejas con sus manos y pongo mis ojos en blanco de nuevo, sé que ella me llamará como quiera y la verdad muy en el fondo siento q