ista de El
ésar estaba sentado frente a mí, con un libro abierto en su regazo, pero su mirada estaba fija en las nubes
sar, su voz suave, rompiendo el silencio. "U
segura de nada en mi vida, César. No puedo q
za no hace las cosas a medias. Cuando proteg
que rivalizaba con la propia empresa de Augusto. Su regreso, y la revelación de su verdadera identidad, se sentía como un giro del destino, un escudo repentino y poderoso d
labras cargadas de emoción. "Por
o, apretando brevemente la mía. "Sie
e la prensa. Era una propiedad extensa, rodeada de árboles centenarios
la familia Garza, estaban diseccionando meticulosamente cada detalle del imperio de Augusto, asegurándose de que recibiera cada centavo al que tenía derecho. Augusto, informaron, estaba
de libros polvorientos, un lugar que se sentía más reconfort
e. "Está tratando de difundir rumores de que eres mentalmente
í que intentaría desacreditarme. "Déjalo", dije, mi voz apenas un susurro.
te. Y Jimena ya está trabajando en una contraestr
eces, su energía burbujeante un bienvenido contraste con mi estado de ánimo sombrío. Se preocupaba genuinament
César. "Pero el equipo legal lo anticipó. Ya han
nciera. Se sentía como volver a respirar después
un sabor amargo en mi boc
tratando de consolidar su relación en público. La está pin
manual de Augusto: manipular nar
r, "tratando de socavar tu credibilidad, insinuando que eres inestable e impulsiva. Incluso le insinu
nsaba. No era solo una amante; era una adversaria peligrosa. "Es
os. "Pero jugamos más inteligentemente. No necesi
iendo momentos de mi matrimonio, buscando señales que había pasado por alto, destellos de afecto genuino que ahora parecían completamente fabricados. Cuanto más miraba,
a Augusto desde el principio, viéndolo como demasiado ambicioso, demasiado frío para su sensible hija. Yo había luchado
brándose, "lo siento mucho.
suave con compasión. "Oh, Elisa. Nunca dejamo
al. Mi padre, brusco pero cariñoso, me aseguró que estaban ahí para mí, siempre. Fue un poderoso recordator
o sueño resurgiendo. Fue una admisión vulnerable. Había renunciado a mis ambiciones de act
nando sus labios. "Esa es la mejor noticia que he escuchado en toda l
no se trataba solo de escapar de Augusto; se trataba de reclamarme a mí misma.
cada demanda financiera. Pero los abogados de los Garza fueron implacables, armados con pruebas irrefutables
fotos que abarcaban una década. Aniversarios, vacaciones, cenas casuales... momentos íntimos que reflejaban los que yo había compartido con Augusto
bía vuelta atrás. No quedaba nada que salvar. Solo un espacio hueco donde solía e
lo que podía. Todo lo que quedaba era una resolución de acero. Esto ya no se trataba solo de escapar. Se trataba de reconstru
de todo. Mi enfoque se centró en mi propia recuperación. Comencé a tomar clases de actuación de nuevo, sintiendo la familiar ol
liencia, mi fuerza silenciosa. Probablemente esperaba que me derrumbara, que le rogara que vol
nó con un número desconoc
y ronca, llegó a través de la lí
viejo miedo. Pero rápidamente se calmó. "No
acabado! ¡No puedes simplemente tirar diez añ
i voz firme, mi convicción inquebranta
erada entró en su voz. "No hagas esto, Elisa. Por fav
ecesidad, una utilidad, no una persona. "Adiós, Augusto". Terminé la
e devolvía la mirada todavía estaba magullada, pero

GOOGLE PLAY