Las capturas de pantalla de los an
¡Guerrero de Fu
de Bambú, la usaron y
uién se cree que es para e
ía contenido finalmente brotaron, silenciosas y calientes. Se acurrucó en su silla, el dolor tan int
él la viera, a la verdadera Sofía, para que entendiera lo que había perdido. Le envió un mensaje de texto desde u
co que acentuaba su figura. Se maquilló ligeramente, dejando que su belleza natural brillara. Cuando salió a la calle, sintió
on. Luego las cuatro. Y las cinco. Héctor nunca apareció. El sol comenzó a ponerse, tiñe
estaba oscura y casi desierta. Dos hombres de aspecto sospechoso l
con tanta prisa?", dijo uno d
o la agarró del brazo. "No seas así,
de la nada. Con dos movimientos rápidos y precisos, neutralizó a los agresores. "Lárguense. Ahora
acias". El hombre la miró con preocupación.
eléfono de Sofía vibró con una notificaci
é, tonta? ¿De verdad pensaste