esto no
n cr
dado su con
zumbido estéril de un quirófano, fueron lo prim
ba, un pavor helado
iejo amigo de Ethan, es
novia
rló Ethan, con la voz cargada
cesita e
atible al c
ñó
lo
eló la
bía sido un fantasma en nuestra relación, ah
i cuerpo pesaba como el plomo y
línea de fuego abrasador
econstruyendo a Ethan Reed y su emp
un animal para la mujer
a mi cama, con una estudiada expresión de preocupación en el ro
na enfermera confirmó mi pesadilla: «El trasplante
jaron con una c
olidificó en una fría
aca
ué un contacto al que no
ival de Ethan, u
bló mientra
uí decir con
aciones que conozca las estrategias de
voz, tranquila y seria, se abrió paso
, en si
uar
o tenía un ligero sabor metálico, pero sonrió, y las
u fatig
tela
ié e
z años, lo
ieron pesados ca
amente, arrastrándome a una o
té con
no en ninguna habi
a fuerte, a
itaba l
ante deslumbr
y rápido, me o
o esta
es oí
rincipio, lue
an, cortante
unda, más tranqu
esto no
n cr
dado su con
oz de Be
Ben C
migo de Et
iruj
eló la
ndo ese pragmatismo escalofriante que yo conocí
novia
mente mi
cesita es
atible al c
galo, en
o precio
lo
supu
iempre había poseído un trozo del alma de
strozado tras aquel accidente de esquí en Aspen, s
Ben era incrédula, teñida de una
iñón,
odo lo que ha
su carrera
isma para que volvieras a caminar cuando
han fue seca, desp
tenía
elic
es fu
me casaré
ha que
lo una com
lo nece
está e
lic
bía llevado a este punto, a u
ue
nsa por años de dev
io estrés, sin sospechar nunca de los «suplementos herbales» que Ethan
y furiosas me esc
funda que me robó el
pesaba com
pero solo un débil gemi
ando -dijo Ben,
prisa -es
ue esto
gudo que cualquier dol
una sensación de
ínea de fueg
bis
e se ta
z a
de amor, de
na investigación que una vez me había prometido un futuro b
ndolo, piez
a e
, un recurso para ser saqueado par
vió a arremolina
la acogí c
eco sordo del tormento
riñ
a
cada en el altar
gí, la brillante luz del
na habitaci
de hospital,
me palpitaba
arganta en
n, con una expresión cuidadosam
o a la cama,
staba húm
racias
ado un bu
ente, con la
quiste ovárico -dijo, c
a de u
s a est
izo un traba
tir
men
aquello fue una nueva puñalad
, enfurecerme
imas silenciosas y amargas que ro
sto que ahora se sent
no ll
p
s a
sa
estado men
éfono
se desvaneció, reemplazada por
rmuró, ponién
n poco
por ti, p
elado artesanal de ese p
s cómo
me dio un bes
ó como e
ré más
can
sin más
ndo
a v
Ch
nía que una tormenta del nord
cerró tras él
to solo por el lejano lamento de una sirena
fermeras entraron
rros, no destinada a mi
an devoto de la señ
o a buscarle hela
mujer af
su lado después de s
ante d
nte de riñ
riñ
jaron con una c
olidificó en una fría
era
fin
oportun
s exc
ntas mi teléfono en
mientras me desplaza
sino con una desesperada y crecient
h H
al de negocios d
r su integridad, su b
vez, hacía años, en un pan
nte mientras yo hablaba,
pretón de manos, el
panel reposaba en su escritorio, por lo demás va
sentimental al qu
no sonó d
h Ha
ra tranqu
uí decir, con
va Mi
pa
ciente para sentir
ando, con un toque de sor
ás b
nas
ras saliendo a borbotones antes
conozca las estrategias de Reed Innovate... y qu
profundo, extendiéndose por
rándome para el recha
su voz, ba
, en si
uar
ude oírle elegir sus palabras con c
ás s
purificadoras esta vez
segur
n -d
te
ea se
do mi teléfono
te
ueva
ueva
portu
s de las aerolíneas, mis de
st
o i