no te enfrentes a él. Todavía no. Déjame reuni
eldad casual, la complicidad de
e salir
ser vista, dirigiéndome esta vez hac
es y adoradores para Michael,
una mujer que reconocí vagamente como su a
a simpatía-. Siento muchísimo que t
a pulsera de diamantes que nunca
un respingo.
til. Michael me advirtió que podrías poner
de mi embarazo -siseé, m
Prácticamente somos hermanas en la maternidad ahora. Aunque, por supuesto, m
era una bur
je, tratando de mantener la v
do ligero y etéreo que
error. Fue una elección. Su elección.
ras sonando huecas incluso mientras l
on-. Me dijo que estabas teniendo algunas... co
¿Había discutido mi embaraz
más para convencerme
¿O quiere la idea de ti? ¿Las conexiones que tu madre proporciona? ¿La vida có
olpe físico que m
mago, una ola de náuse
decir, apoyándome en l
onrisa ensanchándose-. Esta es mi fiesta, después
crueldad, era
co aterrador de las advertenc
amenazó con traga