mportante del año. Siempre iba del brazo de Ricardo, sonrien

ez, fu

ellos. La noticia de mi inminente divorcio ya debía de ser el chisme

ba colgada de su brazo, luciendo un vestido deslumbrante que yo

rte aquí," dijo Ricardo,

rtenezco aquí," respondí con cal

una sonrisa afi

e mis mejores creaciones," dije, mirándola di

radición en la empresa de Ricardo: abrir una "cápsula del tiempo" que los empleado

nudo en e

a de madera con una sonrisa nostálgica. Sacó

e no estaba en un sobre. Esta

o. El maestro de ceremonias, un hombre jovial y

ce siete años!" exclamó, y empezó a

para su yo futur

i. Me caso con Elvira, sí, pero es solo un arreglo. Ella es buena, es amable, pero no es tú. Nunca nadie será tú

e sentir sus miradas llenas de lástima, de morbo. Mi cara ardía. Era una humilla

o, mirándome con una expresión de pánico. So

piendo el silencio. Era el teléfono personal de Sofía, que él

para Sofía. Un hombre al otro lado de la línea, claramente bo

os estás! ¡Me dejaste

de quitarle el teléfono a

untó Ricardo, su voz a

ser el exnovio que Sofía acababa de dejar, apareci

ctamente hacia ella. "¡Me usaste

ionar, Ricardo se movió. Empujó al hombre con una fuerza brutal, ha

s de una furia que nunca le había visto. Se paró frente a

tamente ajena a todo. El amor, la pasión, la violen

do tomó a una temblorosa Sofía del brazo y la

cientos de ojos clavados en mí. Me levanté, alisé

que el agua caliente corriera sobre mí. Horas después, Ricar

, yo..."

tí en la cama, dándole la espalda. No quería sus expli