rez, iluminando el polvo que flotaba en el aire. El olor a viñedo
móvil: el día antes de
e la empresa vibró. Er
heredero de los Castillo! ¡Estáis todos i
. El mismo mensaj
río. El dolor, la traición, la humillación. Apreté los puños
olvería
il por el shock del renacimiento, pero mi me
s de seda. Los empleados, los mismos que en mi vida pasada me habían dado la es
denes con una sonrisa radiante. Llevaba un
isa se hizo más a
uerida! Just