una risa cort
s loca? No voy a d
aciendo un berrinche. Subestimaba l
Nuestra fe católica no lo permite
sma que él había pisotead
ontaré que la tragedia te ha v
r mi mano, pero yo retroce
nuestro. Bienes conyugales. No te irás
que construí con mis propias manos mientras él f
ión constante, pero mis ojos esta
a voz firme. "Ya no soy tu esposa. E
antiguo cuarto de soltera,
juntos. Recordé cómo llegó a mi pueblo, con su aire de artista de Madrid, después de que Isa
me
u sueño de ser abuelos. Javier les sonreía, les prometía que cuidaría de mí, de su ni
uperponía a cada recuerdo feliz, borrándolo para siempre. El amor s
habitación, él estaba en la cocina, pre
cariño. He pe
los papeles que mi primo, abogado en Sev
divorcio,
Su rostro se descompuso. La inc
ca!" ,
les y los rompi
a es mía! ¡La pastelería es m
muté. Lo mi
e la casa, dejándolo solo con su rabia y los tro