pudiera volver atrás.
ella me creía moribundo, justo después de descubrir que mi mujer, supuestam
trimonio, veinte años más joven, con es
e, con su sonrisa perfecta, com
i con Ricardo, el músico, co
os, las burlas de él, y la verdad: ella pla
problemas y, cuando me negué a ceder a
ble, una traición que
me incondicionalmente podía
arsa, decidí que n
sa muerte para escapa
rición en la Patagonia, u
el apoyo inesperado de Sofía, una mujer
laré el imperio de corrupción de su familia, mientras I