mientos al bajar de nuevo,
as?", preguntó, su
pondió Sofía, su vo
Elena borró cualquier otra preocupación de su me
Sofía no
euforia. Se levantó y caminó por la casa a oscuras, sintiéndose una e
iguiente, rom
ochenta y cinco gra
traje. Dejó el
jó, notó el cam
a irritación apenas contenida. Era la pri
Sofía con calma. "Estaba
desmantelar la dependencia que é
pero su teléfono vibró en ese
centró de nuevo en la pantalla. La pequeña
teléfono, Sofía dejó
at
sta, molesto por
el div
incluso a ella misma. No había drama, ni
ormación. Luego, una sonrisa cond
distraído, como si ella estuviera habl
atención a
. Ni siquiera en ese momento podía capt
apeles. Solo tie
ento y un bolíg
Elena, cogió el bolígrafo y garabateó su firma
desprovisto de significado par
peles. "El período de reflexión legal
igas", repitió él
asa durante cinco años, el hombre por el que había sacrificado su futuro
alma casi cruel. "¿Has entend
tado. "¿Qué? ¿No era el consentimiento pa
n abrumadora que Sofía no pudo e
sando que estaba cumpliendo con
eo. No e
s escaleras, dejando a un Mateo confundi
e él como la confirmación final d
er las maletas, Sofía
Vargas patrocinaban, una institución que ayud
la muerte de sus padres y que ahora dirigía un peq
dijo la anciana, sus ojos
iarme, abuela
ció sorprendida. Le ap
merecido. El mundo es grande, Sofía.
ciana fueron la valid
enorme se levanta
de Madrid. Por primera vez en cinco añ
ntía