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Historia

Capítulo 2 Recuerdos de la Selva

Palabras:1668    |    Actualizado en: 31/05/2025

te de mí, pero también son recordatorios de lo que hemos perdido. Nací entre sus sombras y su luz, y aunque amo la selva, siento que guarda secr

de la selva del Brasil, pero su mirada, cargada de un dolo

levó todo lo que amábamos. Mis recuerdos son fragmentos dolorosos, como ecos de gritos ahogados y sombras de desesperación. Mi madre y mi abuela pagaron un precio terrible para salvarnos, y aunqu

de amor y determinación. Me abrazó con toda la fuerza que le qu

Vive. No dejes

scapar, mi abuela lanzó un hechizo que la maldijo para siempre. Ahora, Rosaura solo puede ser vista como realmente es por aquellos que la aman de

l Putumayo, donde una manigua indígena nos ofreció ayuda y cuidado por tres días. Pero la esperanza era efímera. Después, iniciamos un recorrido desgastante por tierra, atravesando Colombia hacia Necoclí, y

a un hechizo de protección en las noches, pero el temor siempre estaba presente. Ella trabajó de todo lo que pudo, aprendimos a sobrevivir y a cuidarnos en un mundo que pa

aso que dábamos era un recordatorio del sacrificio y el sufrimie

re las hojas, voces que parecen querer decirme algo. Hay una conexión

en el Pre

e por Rose y el peso de las expectativas de su familia. Rose lo mira de reojo mientras sirve café. Su rostro es tranquilo, pero

ta, pero es nuestra. Y mientras estemos juntos, seguiremos adelante. Siempre los apoyaré en su relación y me enfrenta

todo su ser, incluso cuando las críticas y los rumores la persiguen. Nad

una relación homosexual con Andrew. Pero nosotros conocem

tegerme son inquebrantables. Cada día me recuerda que debemos seguir adelante, que n

ve. Devoro la comida con ansias, como si cada bocado fuera una forma de absorber la energía necesaria para el día que tenemos por delante. Rose me lan

ono burlón, mientras levanta su taza de café

llena, sintiendo cómo la risa burbujea en mi pecho-. ¡

momento. La risa de Andrew se mezcla con la de Rose, creando un refugio cálido. Aunque el m

modestia, rebosa de vida y color. Hace aproximadamente tres años que nos mudamos a nuestro p

roquia en un barrio muy pobre de la ciudad. Allí, el padre Santiago cuida de los niños que, como

a maldad que nos rodean. Pero su bondad no debe confundirse con debilidad. Su rebeldía en la juventud lo llevó a desafiar las normas eclesiásticas, cuestionando el despilfarro de recurso

as y ofrecerles una salida. En su corazón, sabía que cada niño que llegaba al hogar merecía una oportunidad, y por eso, estableció reglas firmes. Aunque es justo y compasivo, no tolera la deshonestidad n

equeñas cosas. Aunque el pasado nos persigue, aquí encontramos un nuevo sentido de pertenencia. La comunidad, a pesar de las dificultad

ante mis ojos. Las humildes tiendas de barrio se desvanecen, dando paso a grandes centros

nsimismamiento-. El padre Santi llamó para recordarnos

i rostro. Santi siempre se preocupa

mezcla de cariño y nostalgia-. ¿Dijo s

cordar la llamada. -¡Sí!, imagínate que nos que

rmura Rose, mietras me

pre ha estado atenta a mí, buscando maner

ndo, intentan

pasa

nsando en

verdad? -pregunta con

, el de la Loba, la m

ue este día sea especial para nosotras -

os y santi , no pienses más en ese sue

ry Club Arms, siento que, a pesar de todo, no estamos solas. Esta Santi, l

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