o 2. El
. Ciro había llevado al juzgado a un par de compañer
devolverles la ayuda recibida. Si estaban con él y ganaban, algo de lo que estaba seguro, eso les ayudaría a sus compañeros a hacerse un hueco com
mos y que tenían todo bajo control, Ciro, que estaba acostumbrado a observar a la gente y a saber cómo se sentían. Se fijó detenidamente en ellos y compro
espera de que el juicio comenzase. Poco tiempo después, el juicio comenzó. Ci
nte de lo que pasaba en aquella sala del juzgado de Danovro, mientras que cada día que pasaba y tenían que ir a dicha sa
ido, sino también porque le encantaba ver a Ciro, como se expresaba ante los periodistas
miraba las noticias
el en un intento de que volviera a la reali
hasta el día de hoy, no solo deberán pagar una cuantiosa cantidad de dinero a cada una de las víctimas, sino que es probable que se comience a investigar a varios a
Ciro era un gran abogado, había escuchado a su padre hablar de él y de todo lo que hacía desde com
arse como abogado. Si ya como abogado junior, está en la cumbre, esto ya haría que no hubiera abogad
siado hasta llegar aquí. Y más con
ica novia de instituto, pero se supone que hace años que no se le conoce a nadie. Y se dice que su círculo de amistades es muy estrec
omentó Hazel con una sonrisa. Le hacía gracia q
intentará esconder que le interesaba Ciro. Hazel movió la cabeza. Realmente, su hermana era interesante. No podía gustarle
su teléfono. Era Fe
s exámenes no nos hemos visto. Tengo que contarte
hacer todo. Hoy es mi
sabes, en mi cafetería favorita. - dij
sejó seguir estudiando, pues aún le quedaban algunos exámenes que realizar. Sir
erándole. Nada más verla, levantó el brazo y la saludó
ada. - dijo Fergie
azel sabiendo lo demandante que era su amiga, pero también tenía razón. Per
que contarte. En unos días empezar
- pregun
stó Fergie con felicidad. Era uno
- dijo Hazel alegrá
e contártelo. Después de Calvin, qu
y consiguió trabajar en el mejor hospital del país. Era difícil encontrar traba
No lo lleva uno de los jefes de tu padr
al que suele proteger mi
está con esa gente. Ciro ha sabido ll
pre está viendo las noticias en la televisión sobre el tema o
e la gente se interese más. - dijo Fergie enrojeciendo.
s esperaba a su padre. Debía reconocer que au
aba esperando a mi padre..
!? - exclamó Fergie
er el bus. Mi padre me dijo que me dirigiera para allí y nos íbamos direct
dijo Fergie, mientras Hazel sonreía. Realmente, su amiga no tenía nin
Hazel con preocupació
al vez tengáis algún problema. - respondió Fergie. Hazel se lo pe
ste, es demasiado desco
a haber problemas si se lo contaba, cambiaron de tema. Fergie era
arar la cena y la entrevista que tenía al día siguiente. Fue
familia, recogió
ero no le había ido muy bien. Esperaba qu
, se quedó
su hermana estudiando, se dirigió a la empr
buscaban nuevos empleados. Entre estos nuevos empleados, necesitaban alguien que hubiera
, amplia y luminosa. Se acercó a recepción y
e las anteriores y cuando terminó, salió bastante contenta, pero aún así no estaba segura. Quedaron en lla
escaseaba y siendo tres en casa, era necesario llenar nuevamente la despensa.
pró todo lo necesario para tener
udiaba. Ya le quedaban pocos exámenes y prefería encargarse ella de todo. Este curso y el que vi
u hermana podría comer cuando ella qu
no lo veía y quería verle. También sabía que seguramente esta
no, notó su voz dura y molesta.
en un Ghibli color gris. Ella entró con
s vemos. - musitó Boris
unos días demasiado oc
nco minutos para mí? - preguntó B
ue puedo, quedó conti
conmigo. - musitó Boris. Hazel suspiró. No
o. Le urgía quedar conmigo. -
tuviste interés en verme. - dijo con rabia H
o y estoy contigo, pero jamás voy a dejar de ver a mis amigos o familia por
or delante de mí? - volvió a preguntar Boris arran
antes que tú. - contestó Hazel bastante molesta. Se le habían quitado las ganas de estar con Boris. Sabía que era bastant
años contigo. Soy tu pareja y debo ser lo más importa
? ¿Acaso ella no tenía una vida? ¿Una familia y unos ami
s? - preguntó Hazel en un intent
además mi trabajo necesita que haga buenas co
í lo necesitase? - vo
ás un trabajo así. Tampoco lo necesitarás. -
ientras su mirada se dirigía hac
o ya no quieres estar conmigo? -
- dijo Hazel. Boris sonrió mientras aparcaba. Acabab
as salía del coche y la obligaba a salir. Hazel se resistió pero fi
r se comenzó a dar cuenta de que algo pasaba. Hazel tenía su rostro lleno de molestia y los ojos comenzab
irada oscura se p
provechaba para salir con su hermana. Sabía que volvería al extranjero para hacer un mást
del coche y la arrastraba a través de la plaza. Se dió cuenta, de que ella era Hazel. La recono
hija. Sabía que seguramente, Einar no sabía lo que sucedía. La sangre
ta de que a su her
ando hacia donde se dirigía la mirad
o sé. - gruñó Ciro mientras comenzaba a
acabó propinando un puñetazo en el rostro, haciendo que cayera al suelo. Boris se levantó tambale
tias, mientras Ciro empuja hacia atrás a Haz
ver enfadado. - dijo Ciro mientr
í. - refirió con chulería Boris. Ciro se acer
econociendo. Era imposible no hacerlo. Las últimas semanas, había salido en todos los medios. Era Ciro Inter Edevane, uno de los mejores abogados junior e hijo de u
rte con la alta sociedad de la ci
bservó. Ella no la reconocía. Sabía que no conocía a todos los familiares que trabajaban para su familia en la casa, pero genera
es de seguir molestando a aquel abogado. Sa
ficientemente lejos, C
s seguro. Pero he de decirle que a su padre, Einar, n
gustos de su hermano y si él había hecho
Hazel miró averg
ñor Edevane.
í. Generalmente no va a mejor. - refirió Ciro, tras lo cuál se
. Salvo con ella o su madre. No solía hacerlo con ninguna otra mujer, salvo..... Fátima negó con la cabeza. No quería recordar aquello. Se subi
Hazel su dirección,
cidos, Fátima no pudo aguantarse
eguridad de nuestra familia, ¿V
Einar Berrycloth.
- comentó Fátima con una sonrisa. Hazel se relajó algo. Fátima parecía algu
gualmente. -
stante buena de la ciudad, no podía compararse con la zona de l
y se aseguró que subiese al ascensor. Cuando las
he Continental GT y los había seguido. Estaba furioso. Su rostro estaba enrojecido, su mandíbula apretada y s
que Ciro y su hermana se iban de allí. Ajenos
nante. - dijo Fátima. Ciro sonrió. Sabí
pudiera gustar. Aún así, Fátima lo conocía bastante bien y aunque él no lo
ás os gusta a los hombres. - comentó Fátima con desparpajo, intentando ver la reacción de su hermano. Este se rió. Debía reconocer que su hermana era ocurr
anante. - dijo Ciro, mientras mir
lo deje por alguien que lo valore. - comentó Fátima, ya alg