img Reinicio 18+  /  Capítulo 5 ¡Mírame! | 71.43%
Instalar App
Historia

Capítulo 5 ¡Mírame!

Palabras:2302    |    Actualizado en: 28/01/2024

stallar. Ese viernes por la mañana su humor era terrible, estaba vociferando al teléfono, algo había sal

arreglando como siempre cuando escuchó uno

! Ojalá sirvieras para algo diferente que darme problemas. -Mina se asustó con los gritos

iato. -Estaba asustada y apenada, Rose la miró sacada de onda y le sonrió,

bajo. A veces las cosas no salen como debieran y... -Una incómoda pau

estaba más enojada. Mina se encogió de hombros y se fue a la cocina a preparar la comida, estaba revisando su pec

ra. «De verdad no entiendo como el señor la soporta, hace unos años no era así, todo empezó con su promoción en el trabajo se volvió grosera, osca y desapacible con el señor Fr

s cosas en el piso cerca de un pequeño armario donde antes acostumbraba a g

Esperó un momento y no obtuvo respuesta, su

o su día? -Le sonrió como siempre y

e de comer? -La miró ansiosamente mientras se quit

ensalada. ¿Quiere que le sirva vi

rió- necesito alcoholizarme. ¿Ro

mejor no moles

l humor? -Su hermosa sonrisa y su chispe

rutando el platillo y ella se reía al verlo. Después de un rato, tomó su saco del armar

ora te vas como si nada? Claro a veces solo quieres pelear. -Fred respiró com

e vuelva un bufón solo para que me veas y no te escandalices ahora que me voy de regreso al trabajo? No tengo ganas de disc

molestó

ra va

ida de tiempo! ¡Te

intió el corazón en un puño y

día se la pasó llenado formas de la evaluación de Mark, se distraía juntando la evidencia neces

e tomó unos minuto

, malas, graciosas y no tan lindas que me suceden. Pero no puedo, ni siquiera volteas a verme, es como si fuéramos dos extraños viviendo en la misma casa compartiendo una cama y eso eventualmente. Siempre estás muy ocupada para dormir, a v

el camino se le hizo eterno solo de pensar en que ella estaría

Qué tal tu día? -Una mirad

e me quedé toda la noche trabajando y todo el día desde aqu

día te desquites conmigo. -La burlo

endido? Oh, es cierto. Solo tú puedes e

sucede? No s

asqueroso, así que si no te importa saldré a camina

olesto, frustrado y sorprendido por su actitud, estaba ind

aba llevarla por helado, por un café, o simplemente a Central Park a ver el anochecer. Ahora ella ni siquiera me voltea a ver y encima se enoja conmigo de todo. ¡Maldita sea! ¡Odio mi vida! ¡Nada vale la pena! Todo lo que hago no sirve. -Estaba tan enojado que lanzó un florero y lo rompió, para luego dejarse

Fred tenía el sueño muy pesado, así que ni siquiera intentó despertarlo, solo le puso una almohada y una cobija. Lo miraba sin

o recién nos casamos, salíamos todo el tiempo a citas, cosas pequeñas, luego empezó la rutina,

vemente y empezó a llorar con

o desde la perspectiva errónea? Extraño tanto tus besos, como solías abrazarme por la espalda cuando cocinaba, llegabas y me ayudabas a servir la mesa, me sentabas en tus piernas y compartíamos el plato

rfume amaderado que tanto amaba se desprendía de la cama con tanta fuerza que se perdió por un momento, al volverse miró en su mesita de noche la foto de él, hacía diez

más, al abrir la puerta del dormitorio estaba Fred parado, se miraron como si en muchos años no se hubieran visto, sus

ello, enredando sus dedos y tirándolo con suavidad, ambos saboreaban sus alientos y sus lenguas se encontraban juguetonas en

quieres que te toque? -Estaba sacado de onda c

daré una ducha, si no te importa. -Bajó la mirada y se dio la vuelta para irse al

un delicioso beso en la frente y la soltó, ella no respondió solo se fue a b

nte a bañarse, tomó un Shampoo y mientras lavaba su espesa melena se dio cuenta que era el de ella, lo frotó con fuerza haciendo mucha espuma que empezaba a r

excitaron y empezó a recordar como ella lo trataba, su

dome pícara, tus manos tan suaves y lindas recorriendo cada centímetro de mí, como te gustaba agarrarme del cabello y tirar con suavidad de mi cabello para luego besarme hasta perder el aliento. A veces te dejabas ha

timuló pensando en ella, como eran esos días en los que se le entregaba como si no hubiera mañana, como lo tocaba y lo besaba,

o me sigas rechazando como en estos últimos meses-. Una lágrima rodó por su mejilla y terminó de bañarse, salió y se preparó para el día siguiente, una vez más la rutina empezaba a domina

mejores épocas lo invadían s

Instalar App
icon APP STORE
icon GOOGLE PLAY