a este lugar?
. -suspira y sonríe ladina
quella chica fue alguna vez una niña a la que cuidó y la salvo d
bosteza. -Me regresaré a casa por mi
brillantes le agradece, agua
nik, si no te molesta. Son deliciosos panes de jengibre. -dice mientras observa la puerta de la peq
al ver que ella corre para cruzar la calle
arta ella misma, pues el hombre y
dos frente a frente, disfrutando de lo que supuso son tazas de café con leche. Con una mirada y leve inclinación saluda a la anciana que la mira con desprecio, claramente no le agradaba en lo absoluto después de lo que hizo, "Por Dios, sí que me odia...", suspira pensativa. Toma una galleta de
a su compostura. El chico respondió de vuelta en mandarín, uno muy
el delantal de panadero, pero le hacía ver más "Guapo...", pensó y sonrió satisfecha por breves segundos. Observó con detenimiento y rapidez su cabello sedoso, según sus análisis, el chico se lo había cortado dos días atrás; Sus labios y cuello tan... "Adorables y comestible
váyase de
io y lo que más le enervaba, era que no la miraba a los ojos ni por un segundo. Su abuelo, desde la parte trasera, sonreía al verle sorprendida, cosa que la temible Duscha no podía notar. Por unos segundos creyó que tomaría del cuello al chico y lo amena
, vuelve a la cocina,
a bajar su mirada aun sonriendo con suavidad. Petya, por otro lado, se le había detenido el corazón por unos segundos al ver aq
elvo y repi
. Definitivamente, explotaría en cualquier momen
el joven frunciend
o paso para pe
nencias y desastres que ha causado, le ha pedido disculpas a alguien. Pero no hacer la paz en ese momento con
asó el otro día. -suspira si
N
ta en medio de
oven la mira a los ojos por un momento y luego parpad
sculpas? -cuestiona al chico entre
uella mujer terrorífica. -Usted debe estar acostumbrada a que todos hagan y digan lo que usted le place, pero aquí, no va a pasar, así que váyase de mi cafetería en este momento, señora. -abre la p
en le causaba mucha incomodidad, pero nunca pensó que enfrentaría así a alguien. Definitivamente, los años en Shanghái lo habían cambiado. No se dejaba am