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Después de que su amado esposo la engañó con su hermana, Lily pensó que nada podría ser peor que su traición... hasta que descubrió la verdad sobre su matrimonio, el cual, desde el principio, no había sido más que una conspiración. La fatal confrontación con su esposo hizo que Lily cayera por las escaleras. Perdió el conocimiento lentamente, mientras yacía en el charco de su propia sangre. Cuando la muerte la tomó lentamente, los últimos momentos de Lily estuvieron llenos de resentimiento e ira hacia todos aquellos que le habían fallado. Pero como el destino no se puede evitar, ella renació para volver a la época de la secundaria.Era el lugar donde habían comenzado sus pesadillas en su vida anterior, pero esta vez, iba a cambiar las tornas.Planeaba recuperar todo lo que le debían, poco a poco. Por fin tendría su dulce venganza.
"¡Estoy embarazada!". Lily Qiao regresó a casa más feliz que nunca, sosteniendo en la mano el resultado de su prueba de embarazo. Quería compartir las buenas noticias con su esposo lo antes posible.
Llevaban casados ya cinco años, y la familia Gu estaba impaciente por la llegada de un bebé.
Lily Qiao había recurrido a todo tipo de métodos para quedarse embarazada, pero ninguno de ellos había dado el resultado esperado hasta ese momento.
Su esposo, Frank Gu, se mostraba comprensivo y apoyaba en todo lo que podía, sin embargo la actitud de su suegra no seguía el mismo camino. Al principio esta no la criticaba abiertamente, pero con el tiempo su actitud fue empeorando hasta llegar al insulto.
"Casarse con una cerda habría sido mejor que casarse contigo, al menos le habría dado hijos. Y si no eres apta para concebir, hay millones de mujeres que sí lo son. ¿Sabes cuántas mujeres desearían tener un hijo con Frank? ¡Si quieres seguir ocupando el puesto de esposa, haz el favor de ponerte las pilas!".
Para Lily Qiao era sumamente duro tener que soportar las humillaciones de su suegra, aunque por el bien de su familia era capaz de aguantar lo que fuera.
Ahora por fin podría cumplir con todas esas demandas.
Ella dirigió sus pasos hacia su habitación y de pronto oyó gemidos extraños al otro lado de la puerta, como si alguien estuviera haciendo el amor apasionadamente.
Se preguntó quién estaría manteniendo relaciones sexuales a esa hora del día en la habitación de ella y de Frank. A menos que...
Apresuró el paso y abrió la puerta.
No podía creer lo que estaba viendo. ¡Su amado esposo y su hermana enredados en la cama en una postura totalmente obscena!
Sus piernas flojearon y por unos instantes luchó por mantenerse en pie ante semejante escena. No podía ser cierto, ¡pero sus ojos no la engañaban!
"¡Frank Gu! ¡Claire Qiao!", exclamó Lily enojada, con la voz rota de dolor.
La pareja se detuvo en el acto y Claire Qiao miró a su hermana con una sonrisa seductora. No había rastro de culpa ni remordimiento en ella, más bien todo lo contrario, ¡parecía estar disfrutando!
"Lily, ¿no estabas en el hospital? ¿Por qué tenías que regresar tan pronto?". Este agarró una toalla de baño y la envolvió alrededor de su cuerpo desnudo. Tampoco mostraba vergüenza alguna tras ser descubierto engañando a su esposa, si bien parecía algo ansioso por la interrupción.
"Si no hubiera regresado tan pronto, ¿cómo podría ver lo que estás haciendo? ¿Es este tu concepto de fidelidad conyugal, Frank Gu? Dijiste que me amabas. ¿Es así como me demuestras tu amor?". La mujer dio un paso hacia delante y le fulminó con la mirada.
"¡Ja, ja! ¿Su amor? Frank solo está enamorado de tus acciones de la empresa, ¿de qué si no? ¿Por qué piensas que sigue casado contigo? Él me ama a mí, entérate ya de una vez", dijo con una risa. "Hoy era el día que estábamos esperando, has firmado el acuerdo de transferencia de fondos y una vez se haya ejecutado, lo próximo que tendrás que firmar serán los papeles del divorcio, hermanita".
"¿Te has vuelto loca?", Lily aún no podía creer lo que estaba escuchando.
"Ya basta, Claire", El hombre no podía soportar ver el rostro de su esposa palidecer ante tantas vejaciones. "Vamos a divorciarnos, Lily, después te pagaré dinero suficiente para que puedas mantenerte económicamente bien el resto de tu vida".
Lily miró asqueada sus caras y tras escuchar sus palabras se tambaleó, agarró el brazo de su marido y gritó: "¡Eres un mentiroso!" ¡Eres un mentiroso! ¡Son todos unos mentirosos! Estoy embarazada, Frank. ¿Me estás diciendo que prefieres tener una amante a formar una familia conmigo tras cinco años de relación?".
"¿Pero cómo puedes estar embarazada? Si cada día te daba ... ". Antes de que este pudiera terminar de hablar, Claire le interrumpió consternada.
"¿Pero qué me estás contando, Lily? Frank te administraba anticonceptivos cada vez que tenían sexo, y ahora tú vas y me dices ¿que estás embarazada? ¿A quién te crees que estás engañando?".
"¿Qué?", Lily estaba completamente aturdida, su cerebro no alcanzaba a comprender todo lo que estaba ocurriendo.
Claire le dirigió una mirada altiva y llena de desdén, y dijo: "No tengo ni idea de quién puede ser el hijo bastardo que llevas en la barriga, pero no te atrevas a decir que es hijo de Frank. ¿Qué hombre podría enamorarse de ti con esa cara arrugada? Ah, y por cierto...".
Fingió sorpresa y añadió, "Casi se me olvida decirte que yo también estoy embarazada, de cuatro meses. O sea que aquí la única amante eres tú, Lily. Y ahora sal de aquí, y deja de acaparar a Frank".
Tras estas palabras, la chica se acurrucó contra el pecho desnudo del hombre y dijo en tono de niña consentida: "Frank, ¿has visto cómo empieza a asomar ya mi barriguita?, tendremos que apurarnos con la boda o de lo contrario ya no voy a caber en mi vestido de novia".
Después, la pareja se abrazó y Lily pensó que era todo un disparate. '¿Así que ahora resulta que la amante soy yo? ¡Esto es ridículo! ¡La amante me acusa a mí, a la esposa, de interrumpir su amor!', ella pensó en su interior.
Ahora se daba cuenta de lo tonta que había sido al empeñarse en elegir al hombre que tenía frente a ella, pues todo formaba parte de un engaño.
"Y deja que te diga una cosa más, hermanita, también fuimos nosotros quienes planeamos el accidente de papá". Y añadió complaciente: "¿Cómo habrías renunciado a tus acciones si no? Así que no te enojes tanto, que incluso papá está de mi parte. ¡Ya va siendo hora de que te mires al espejo y abras los ojos!".
¡Era totalmente de locos! Lily sonrió por no mostrar su enojo. ¿Qué significaba todo eso? ¡Habían conseguido engañarla todo ese tiempo y encima eran sus seres más queridos!
Padre, esposo, hermana... Y lo más triste es que ella estaba luchando por su felicidad, segura de que en cuanto pudiera concebir un hijo todo se arreglaría.
Lily levantó la mano con la intención de abofetear a Frank, pero antes de que pudiera alcanzarlo, Claire la agarró por la muñeca y la golpeó con fuerza. "Maldita zorra, eres como tu madre, débil e incompetente. ¡Tú también mereces que te maten!".
Tras escuchar las palabras de su hermana, la chica se enfureció todavía más, ¡la muerte de su madre también había sido parte del plan! Abrumada por una mezcla de rabia, arrepentimiento y rencor, empezó un forcejeo con Claire.
Como esta era más grande y fuerte que ella, acabó derribando a Lily.
En ese momento, Claire aprovechó la oportunidad para patearla con todas sus fuerzas, concentrándose en su cintura y abdomen.
La otra, por su parte, encogida y retorcida de dolor, trataba de protegerse la barriga con las manos. Su madre había muerto prematuramente y hacía poco también había muerto su abuelo, quien la había querido mucho. Así pues, la única familia que le quedaba en su vida era el bebé que llevaba dentro.
¡Debía protegerlo a toda costa!
"Ya está bien, Claire", dijo Frank mirando a su esposa, que yacía encogida en el suelo. "Lily, será mejor que te vayas. Mi abogado te hará llegar los papeles del divorcio, y por lo que respecta al bebé que llevas dentro... ¡Haz con él lo que te plazca!".
Lily sonrió con tristeza mientras sus ojos se llenaban de amargura. "¡Gracias! ¡Muchas gracias!".
Luego hizo un último esfuerzo por levantarse y, aunque con paso vacilante, consiguió enderezarse y salir de la habitación.
Cuando vio que su hermana se acercaba a las escaleras, un destello de crueldad apareció en los ojos de Claire, corrió tras ella y le dio un empujón.
Lily se dio cuenta de que había perdido el equilibrio, pero reaccionó con rapidez y agarró la mano de Claire, la misma con la que la había empujado.
"¡Ah!", Claire dio un chillido y se agarró rápidamente a la barandilla con la otra mano para evitar la caída.
"¡Suéltame! ¡Suéltame!", gritó, mientras trataba de deshacerse de la mano de Lily.
Desesperada, Lily apretó la mano de su hermana con todas sus fuerzas, había perdido contacto firme con el suelo y su pies colgaban en el aire. Tras unos instantes consiguió agarrarse a la barandilla con la otra mano.
"¡Frank, ayúdame! ¡Frank!", gritó Claire; temía caerse arrastrada por su hermana y perder a su bebé.
Frank salió corriendo de la habitación, sujetó a su amante y pateó fuertemente a Lily. "Mira que eres mala, ¿cómo te atreves a arrastrar a Claire de esta manera?".
Y sin pensarlo dos veces, arrojó a su esposa por las escaleras de un puntapié en el pecho.
Tumbada en el suelo, ahogada por la conmoción, Lily sintió un fuerte dolor en el pecho y en la parte inferior del abdomen.
Sintió cómo un líquido tibio se colaba entre sus piernas y extendió la mano inconscientemente para retenerlo. Presa del pánico, exclamó: "¡Bebé! ¡Mi bebé! ¡Mi bebé!".
El pequeño ser al que trataba de salvar estaba saliendo lentamente de su cuerpo.
"¡No, no!". dijo ella con un hilo de voz, agonizando de dolor. Tenía una herida en la parte posterior de la cabeza, que sangraba también.
"Bebé, bebé...". Su voz se fue volviendo más y más débil hasta que se dejó de escuchar.
Instantes antes de perder el conocimiento, sus ojos se habían fijado en las dos figuras que permanecían de pie en lo alto de las escaleras.
Frank frunció el ceño y bajó pausadamente. Su corazón se estremeció al ver la mirada fija de Lily. Le puso la mano debajo de la nariz y mirando a Claire sobresaltado, dijo: "Está muerta".
En ese momento, llegó a casa la madre de del hombre y, al ver lo sucedido, exclamó sorprendida: "¿Qué ha pasado aquí?".
"¡Se cayó por las escaleras y se mató!", mintió Claire, apuntando a su hermana con el dedo.
"¿Se mató de la caída? ¡Pero qué desgraciada es esta chica! Aunque no hay mal que por bien no venga, estaba ocupando un lugar que no le correspondía. Frank tiene más de treinta años y aún no había conseguido dejarla encinta, puta estéril. Si está muerta, mi hijo se ahorrará tener que divorciarse de ella...". Jade Zhang siguió torpedeando a su nuera con frases hirientes y malintencionadas.
Sin embargo, Lily ya no podía escucharlas y, afortunadamente para ella, ¡ya no tendría que soportar sus humillaciones nunca más!
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