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Clara es una joven fotógrafa que ha estado atrapada en la rutina de su vida diaria, luchando contra sus inseguridades y el miedo a mostrar su verdadero talento. A medida que la primavera florece, Clara se encuentra en una encrucijada: debe decidir si se atreve a dar un paso hacia lo desconocido o quedarse en su zona de confort. La llegada de Mark, un amigo apasionado y motivador, transforma su mundo. Con su apoyo inquebrantable, Clara se embarca en un viaje de autodescubrimiento mientras planea su primera exposición de fotografías. A través de momentos compartidos, risas y sueños, ambos comienzan a explorar no solo el arte, sino también la conexión emocional que se desarrolla entre ellos. Entre la presión de la exposición y los miedos que la acechan, Clara aprende a valorarse a sí misma y a permitir que su voz artística resuene. Mientras su corazón florece en esta nueva relación, se da cuenta de que el amor y la creatividad pueden coexistir, empoderándola para enfrentar sus temores y abrazar la vida. Clara es una joven fotógrafa que ha estado atrapada en la rutina de su vida diaria, luchando contra sus inseguridades y el miedo a mostrar su verdadero talento. A medida que la primavera florece, Clara se encuentra en una encrucijada: debe decidir si se atreve a dar un paso hacia lo desconocido o quedarse en su zona de confort. La llegada de Mark, un amigo apasionado y motivador, transforma su mundo. Con su apoyo inquebrantable, Clara se embarca en un viaje de autodescubrimiento mientras planea su primera exposición de fotografías. A través de momentos compartidos, risas y sueños, ambos comienzan a explorar no solo el arte, sino también la conexión emocional que se desarrolla entre ellos. Entre la presión de la exposición y los miedos que la acechan, Clara aprende a valorarse a sí misma y a permitir que su voz artística resuene. Mientras su corazón florece en esta nueva relación, se da cuenta de que el amor y la creatividad pueden coexistir, empoderándola para enfrentar sus temores y abrazar la vida. Clara es una joven fotógrafa que ha estado atrapada en la rutina de su vida diaria, luchando contra sus inseguridades y el miedo a mostrar su verdadero talento. A medida que la primavera florece, Clara se encuentra en una encrucijada: debe decidir si se atreve a dar un paso hacia lo desconocido o quedarse en su zona de confort. La llegada de Mark, un amigo apasionado y motivador, transforma su mundo. Con su apoyo inquebrantable, Clara se embarca en un viaje de autodescubrimiento mientras planea su primera exposición de fotografías. A través de momentos compartidos, risas y sueños, ambos comienzan a explorar no solo el arte, sino también la conexión emocional que se desarrolla entre ellos. Entre la presión de la exposición y los miedos que la acechan, Clara aprende a valorarse a sí misma y a permitir que su voz artística resuene. Mientras su corazón florece en esta nueva relación, se da cuenta de que el amor y la creatividad pueden coexistir, empoderándola para enfrentar sus temores y abrazar la vida. Clara es una joven fotógrafa que ha estado atrapada en la rutina de su vida diaria, luchando contra sus inseguridades y el miedo a mostrar su verdadero talento. A medida que la primavera florece, Clara se encuentra en una encrucijada: debe decidir si se atreve a dar un paso hacia lo desconocido o quedarse en su zona de confort. La llegada de Mark, un amigo apasionado y motivador, transforma su mundo. Con su apoyo inquebrantable, Clara se embarca en un viaje de autodescubrimiento mientras planea su primera exposición de fotografías. A través de momentos compartidos, risas y sueños, ambos comienzan a explorar no solo el arte, sino también la conexión emocional que se desarrolla entre ellos. Entre la presión de la exposición y los miedos que la acechan, Clara aprende a valorarse a sí misma y a permitir que su voz artística resuene. Mientras su corazón florece en esta nueva relación, se da cuenta de que eClara es una joven fotógrafa que ha estado atrapada en la rutina de su vida diaria, luchando contra sus inseguridades y el miedo a mostrar su verdadero talento. A medida que la primavera florece, Clara se encuentra en una encrucijada: debe decidir si se atreve a dar un paso hacia lo desconocido o quedarse en su zona de confort. La llegada de Mark, un amigo apasionado y motivador, transforma su mundo. Con su apoyo inquebrantable, Clara se embarca en un viaje de autodescubrimiento mientras planea su primera exposición de fotografías. A través de momentos compartidos, risas y sueños, ambos comienzan a explorar no solo el arte, sino también la conexión emocional que se desarrolla entre ellos. Entre la presión de la exposición y los miedos que la acechan, Clara aprende a valorarse a sí misma y a permitir que su voz artística resuene. Mientras su corazón florece en esta nueva relación, se da cuenta de que el amor y la creatividad pueden coexistir, empoderándola para enfrentar sus temores y abrazar la vida.
Capítulo 1: Sombras y Susurros
El sol se levantó sobre la ciudad como un espectro dorado, trazando hilos de luz a través de los ventanales empañados del viejo estudio de Clara. La luz iluminaba la habitación, dibujando sombras danzantes en las paredes cubiertas de imágenes, fotografías capturadas en el transcurso de años llenos de aventuras y soledad. Cada imagen era un ladrillo, una parte de su esencia, un eco de sus anhelos.
Clara se sentó en el suelo de madera desgastada, rodeada de impresiones sin enmarcar. Sus manos, manchadas de tinta y emoción, aferraban una de las fotografías. Era un retrato que había capturado un instante efímero: una mujer mayor sentada en un banco del parque, su rostro surcado de arrugas y su mirada perdida en el horizonte. **-¿Alguna vez sentirás que has llegado a tu destino, abuela? -susurró Clara, rompiendo el silencio que le acompañaba**. En la foto, la mujer parecía tan distante y, al mismo tiempo, tan próxima, como si la vida de Clara estuviera entrelazada con la de ella.
Los recuerdos afloraban como corrientes subterráneas mientras Clara miraba la imagen. La figura de su abuela era un faro de fortaleza y perseverancia en un océano de dudas que crecían en su interior. **-¿Qué harías tú en mi lugar? -preguntó al aire, su voz un susurro que apenas rompía la tranquilidad del espacio**.
La brisa se colaba por la ventana entreabierta, trayendo consigo el aroma de flores marchitas y la promesa de una nueva temporada. La primavera siempre había tenido un aire de renovación que la entusiasmaba, pero este año todo se sentía diferente. Clara había cargado con una sensación de estancamiento, un peso sobre su pecho que parecía crecer con cada día que pasaba. La exposición que había estado planificando durante meses estaba a la vuelta de la esquina y, a pesar de su esfuerzo, la incertidumbre la atrapaba en sus garras.
Se levanto y se dirigió a la pequeña mesa del rincón, donde un cuaderno desgastado descansaba, lleno de garabatos e ideas a medio formar. **-¿Por qué me enfoco tanto en lo que no tengo? -reflexionó, abriendo el cuaderno y dejando que sus ojos recorrieran las páginas llenas de sueños y propuestas que alguna vez la llenaron de entusiasmo**. Con cada palabra, cada frase, se sentía más distante de la mujer audaz que había decidido seguir su pasión por la fotografía. El eco de su inseguridad resonaba en cada rincón, un recordatorio de los miedos que la mantenían atrapada.
Finalmente, se sentó y dejó caer el bolígrafo. El sonido en el silencio resonó como un martillo, un golpe contra el telón de sus pensamientos. **-No puedo seguir así. -se dijo a sí misma, mientras decidía que tenía que ser honesta, aunque fuera solo en su propio cuaderno. Ella sabía que había una lucha interna que no la dejaba en paz, y que no podía continuar ignorándola: su vida estaba llena de expectativas ajenas y experiencias postergadas.**
Un golpe en la puerta la sacó de su trance. **-¡Clara! -la voz de su madre la atravesó como un relámpago, rasgando la tranquilidad del momento-. ¿Estás lista? No podemos llegar tarde a la reunión!**
**-¿Qué reunión? -respondió Clara, entrecerrando los ojos y sabiendo que el tono de su madre no tenía espacio para la indecorosa respuesta de "no sé".**
**-La reunión de la galería. Recuerda que hablamos de ello. -La voz de su madre tenía ese tono de autoridad que siempre conseguía reconducirla, aunque Clara no se sentía del todo preparada para enfrentar la realidad del mundo del arte.**
Podía escuchar cómo su madre movía las cosas descuidadamente en la sala, buscando entre toallas y papeles revueltos. Era como si cada objeto en el espacio también tuviera su propia voz reclamando atención. **-Sí, ya voy. -dijo, sintiendo la presión aumentar en su pecho.** En ese momento deseó que el tiempo se detuviera, que las sombras del estudio se tragarán la luz del mundo exterior, creando un espacio lleno de sus sueños, lejos de las expectativas.
Se viste rápidamente, un vestido sencillo que alguna vez fue brillante pero que había comenzado a deslavarse con el paso del tiempo. Después de todo, no era el atuendo lo que la definía, sino su arte, sus fotografías. Pero mientras miraba su reflejo en el espejo, no podía evitar la sensación de que su apariencia se alineaba con su estado interior: desordenado y tambaleante.
-Qué irónico, ser una artista sin arte en el alma. -musitó, sintiendo cómo la ansiedad le retorcía las entrañas.
Cuando finalmente salió del estudio, el bullicio de la vida se la tragó. La atmósfera vibrante de la ciudad parecía contrarrestar su estado de ánimo, como si todos a su alrededor estuvieran avanzando con confianza, mientras ella luchaba para encontrar su camino. La reunión era importante, tenía que mostrar su portfolio, y ese pensamiento la llenaba de desasosiego.
-Clara, estamos llegando tarde. -la urgió su madre, con esa impaciencia casi materna que la hacía sentirse como una niña otra vez.
El viaje hacia la galería fue un torbellino de emociones. Cada semáforo en rojo parecía una eternidad, y Clara se perdió en sus pensamientos.No es solo una reunión. Es una oportunidad. Pero, ¿y si me ven como una impostora? -se decía a sí misma, el sudor frío comenzando a formarse en su frente. Por un instante, se preguntó si toda la preparación que había hecho realmente valdría la pena, si sus sueños eran dignos de ser expuestos a la mirada crítica del mundo.
Finalmente llegaron a la galería, un espacio amplio e iluminado, lleno de arte vibrante y mentes creativas que pululaban como mariposas en un jardín florido. Clara sintió que sus pies se hundían en el suelo, como si el peso de sus inseguridades la anclaran al lugar. -No deberías haber dejado que tus dudas dominaran tu vida así. -murmuró su voz interior, mientras se acomodaba en la entrada, buscando el valor que parecía esquivo.
Las paredes estaban adornadas con obras sorprendentes, y Clara las observó con ojos críticos, notando los detalles, la maestría detrás de cada pincelada.
-Admiro lo que otros han creado, pero... ¿seré capaz de crear algo que inspire de la misma manera? -un suspiro se le escapó de los labios sin que ella se diera cuenta.
Al ver a los artistas conversando en grupos pequeños, sintió una punzada de inseguridad. Sentía que no tenía la voz adecuada para unirse a sus conversaciones. -Tal vez nunca perteneceré a este mundo. -una sombra de resignación la invadió.
Pero al mismo tiempo, había algo que la instaba a avanzar: un impulso, una pequeña chispa que surgía de lo profundo de su ser. -Esto es solo el comienzo. -se dijo. Clara cerró los ojos un momento, respirando profundamente para calmar sus nervios, anotando mentalmente recordatorios sobre su periplo artístico. El eco de una risa alegre la sobresaltó, y al abrir los ojos se encontró con Marc, su amigo de años y cómplice en el camino hacia la vida creativa.
-Clara! ¡Al fin llegas! -dijo Marc, atravesando el espacio hacia ella con una sonrisa que desbordaba energía.Era refrescante. Su confianza contrastaba con las sombras que había estado cargando, y Clara sintió cómo un rayo de luz se extendía a su alrededor.
-Hola, Marc. Lo siento, me retrasé. Intentó sonreír, aunque el temor se dibujaba en sus ojos. Su amigo conocía esa mirada, y su respuesta lo demostró al darle un cálido abrazo, que la envolvió en su esencia cálida.
-No te preocupes. Lo importante es que estás aquí. -dijo él, separándose para mirar sus ojos-. Quiero que recuerdes por qué haces esto. Tu arte tiene una voz única.
-¿Cómo puedes estar tan seguro? -preguntó Clara, sus inseguridades desbordándose como agua de un vaso lleno.
-Porque he visto lo que puedes hacer. -Marc sonrió con sinceridad, como si esas palabras pudieran deshacer sus miedos. -Además, hoy no se trata solo de ti. Hay otros aquí que también nos necesitamos.
Un grupo de personas comenzó a formar un círculo alrededor de una mesa, y Clara sintió que sería su momento para presentar su obra. Podía escuchar el murmullo de la conversación, el roce de las palabras sobre las creaciones artísticas. Las omisiones e inseguridades lucharon a su regreso, pero las palabras de Marc resonaban en su mente como un mantra. -No estás sola. -se recordó a sí misma, mientras el círculo se iba conformando a su alrededor.
Al llegar su turno, la miraron con expectación. Clara tomó una respiración profundamente. Sus palmas sudaban, pero conocía la historia detrás de cada imagen que iba a presentar. Sin embargo, su voz temblaba y no podía dejar de sentir que la mirada de los demás la atravesaba.-Hola a todos, soy Clara. -comenzó, logrando centrar su mirada en la comunidad que se había formado-. Estoy aquí para compartir una parte de mi vida a través de la fotografía. Cada imagen tiene su propia historia y, aunque tengo miedo de ser juzgada, creo que es hora de que esas historias salgan a la luz.
Empezó a hablar sobre cada foto, sus palabras fluyeron con más facilidad a medida que se adentraba en la narrativa. Ahora, al mirarlos a los ojos, sintió cómo las sombras comenzaban a despejarse. A medida que hablaba, el peso en su pecho se fue
Paola Fischer vive un matrimonio aparentemente feliz hasta el día en que, al regresar a casa, encuentra a su esposo, Lucas Hotman, en la cama con su secretaria, Rose Evans. La traición la deja destrozada, y, sin saber cómo enfrentar el dolor, se marcha de su hogar. Esa noche, en un bar, conoce a un enigmático desconocido que le ofrece una compañía inesperada. Buscando escapar de su desilusión, Paola se entrega a una noche de pasión con él, dejando que el dolor de su traición se diluya en la intimidad. Al día siguiente, trata de seguir adelante, pero pronto se enfrenta a una sorpresa que cambia el curso de su vida: está embarazada, y el padre no es Lucas, sino aquel hombre al que apenas conoció.
Lucia Meller es mi vida, me enseño amar, me enseñó a adorarla, me mostró el mundo de forma diferente, le di todo lo que la vida me ofrecía, y se ha ido; se llevó mi vida, mi amor, dejándome el corazón y el alma hecha pedazos. Ahora me duele respirar, me duele amar, me duele la vida. La quiero, jamás podré volver amar a alguien como la ame a ella; la quiero de vuelta, la quiero conmigo, a mi lado donde pertenece; pero por más que la busco no la encuentro, es como si la vida me la hubiera arrebatado y eso me duele, ella me enseñó que se puede matar a un hombre, aunque se conserve la vida, sin embargo, me canse, no puedo llorar por alguien que no me quiere amar y aunque duele, hoy después de casi dos años le digo adiós a mi sirena; después de todo soy Gabriel Ziegermman. Un año desde que me aparte de Gabriel y mi vida dio un giro de ciento ochenta grados, amar a ese hombre es lo mejor que me ha pasado en la vida, a él le debo el hecho que hoy esté viva y tener a mi lado a mi mayor tesoro, él me enseñó que lo que se desea con el alma se obtiene, pero también me enseñó que amar duele, que su amor duele, a él le debo el dolor más grande, porque dejo de amarme, no fui suficiente para él, me enseñó que su madre, su exnovia y su destino no están conmigo, y aun así lo quiero de vuelta, sé que sus prioridades cambiaron; yo solo pedía una verdad sin embargo él prefirió engañarme y dejarme.Lo quiero olvidar y lo quiero conmigo, aunque no se lo merezca, pero como hago si amar ese hombre es mi arte. Ahora estoy de vuelta y lo único que quiero es tenerlo a kilómetros de distancia, porque me enseñó que yo también tengo derecho a cambiar mis prioridades. Novela registrada N ISBN 978-958-49-7259-0 Está prohibida su adaptación o distribución sin autorización de su autor. Todos los derechos reservados all rights reserved
A veces el amor aparece de la manera más inesperada y en la forma de la persona menos pensada. Para Daniel, la vida a sus 40 años es una rutina entre sus tres hijos y su cargo de CEO de la empresa familiar. El fallecimiento de su esposa lo deja inmerso en la tristeza; creando, con el correr de los años, una coraza fría a su alrededor. Deanna tiene una vida normal, trabaja medio tiempo y estudia en la Universidad de Artes porque quiere lograr su sueño: cantar en la ópera. Solo le falta un año para terminar su carrera cuando su amigo Harry le pide ayuda desesperado. Una antigua regla familiar le impide casarse con su novia, la cual está embarazada. Para hacerlo, Daniel, su hermano, debe casarse primero. Para ayudarlo con su problema Daniel y Deanna acceden a fingir una relación y un matrimonio. Son tan opuestos que la atracción es inevitable. Él encuentra en ella la calidez que faltaba en su vida y Deanna el amor luego de una ruptura desastrosa. Finalmente, Daniel puede volver a tener una familia. Pero hay muchos intereses ocultos que buscan separarlos y alejarlos. El viaje es difícil, deben enfrentarse no solo a terceros que les complicaran las cosas, sino también a sus propios miedos e inseguridades. No es sencillo equilibrar 15 años de diferencia. Pero el corazón tiene razones que la misma razón nunca entenderá.
Janice, la heredera legítima olvidada hace tiempo, se abrió camino de vuelta a su familia, volcándose en ganarse sus corazones. Sin embargo, tuvo que renunciar a su propia identidad, sus credenciales académicas y sus obras creativas en favor de su hermana adoptiva. A cambio de sus sacrificios, no encontró calor, sino un mayor abandono. Decidida, Janice juró cortar todo vínculo emocional con ellos. Tras quitarse la máscara, ahora era conocida como maestra en artes marciales, experta médica y célebre diseñadora que sabe ocho idiomas. Con una nueva determinación, declaró: "A partir de hoy, nadie de esta familia se cruzará conmigo".
No fue mi elección nacer hija de la mafia, pero elegí ser la esposa de la mafia. Después de la muerte de mi padre, mi abuelo era demasiado viejo y vulnerable para defender a nuestra familia de los enemigos de mi padre. Y la única forma de asegurar nuestra supervivencia era que yo me casara con el jefe del poderoso clan Mellone. Mi dote es un pedazo de tierra codiciado por el mismísimo jefe del clan. Yo, Giulia, odio a mi novio. Ya lo he dicho. Lo odio con una pasión feroz, que hace arder mi cuerpo Detesto todo lo que tiene que ver con él: su insufrible arrogancia, su sonrisa burlona, sus peligrosos ojos grises metalizados y su corazón corrupto y vicioso. La forma en que todos se someten patéticamente a cada una de sus palabras y se apresuran a servirlo como si fuera una especie de dios me irrita muchísimo. Pero lo que es peor, odio la vergonzosa forma en que mi cuerpo responde al suyo. Tiemblo por él. La intensidad de mi deseo puro me sorprende y me repugna. ¿Cómo puedo desearlo tan desesperadamente si lo odio tanto? Es como si fuera el mismísimo diablo y me hubiera hechizado.
Nerea Jones es una chica acabada de graduar de la universidad que sale al mundo dispuesta a abrirse camino en el mundo empresarial, pero, esto no es tan fácil como ella lo cree. Su situación económica hace que se vea obligada a aceptar trabajar de niñera para uno de los CEOS más importantes, temidos y guapos de Seattle, Alex Black. Su vida se entrelazará con la de él conviviendo en la misma casa. Ella no tiene idea de que le tocará vivir un infierno a manos de este chico prepotente y egoísta cuando los sentimientos comiencen a tocar la puerta de su corazón. Ser profesional no va resultar tan sencillo como ella se espera.