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Libro y Cuento de insolar

LA TESIS DE LA MAFIA

LA TESIS DE LA MAFIA

5.0

Una historia de amor que, por estar la pareja en situaciones complicadas y las dos familias en clara desavenencia, todo parece indicar que era aparentemente imposible. Después de una lucha de parte y parte y múltiples situaciones, algunas peligrosas. La incertidumbre, si podrá o no ser, los embarga. No existe la certeza de que esto pueda materializarse definitivamente y la lucha entre parte y parte, resulta casi épico.

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Venganza de La Princesa

Venganza de La Princesa

5.0

El frío de la muerte todavía se aferraba a mis huesos, recordándome la sangre que se escapaba, llevándose la vida de mi hijo nonato. El dolor fantasma en mi vientre vacío se mezclaba con la traición de mi hermana Valentina y la indiferencia de mi esposo, el Príncipe Alejandro. Todo se me derrumbó: fui víctima de una "caída accidental" orquestada por Valentina que me robó a mi hijo y mi propia vida. ¿Cómo era posible tanto engaño? ¿Cómo pude ser tan ciega a la maldad que me rodeaba, especialmente la de aquellos a quienes más amaba? Pero contra todo pronóstico, abrí los ojos y el calor del sol me devolvió a la vida, a un momento crucial antes de que la tragedia me consumiera, dándome una segunda oportunidad para reescribir mi destino y el de aquellos que me traicionaron.

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El Fin de una Obsesión

El Fin de una Obsesión

5.0

La noche en que el palacio anunció que el Príncipe Heredero elegiría a su consorte, Sofía, mi prometida, no regresó a casa. La esperé toda la noche, con el puño cerrado y el corazón apretado, en esa mansión Sánchez donde crecí como su huérfano "adoptado", destinado a ser su leal protector y, creí, su futuro esposo. Pero al amanecer, una carroza real trajo no solo a la arrogante figura del Príncipe Alejandro, sino también a Sofía, pálida y con la mirada perdida, su vestido arrugado. Él me entregó una prenda íntima de ella que yo mismo le había regalado, la olfateó lujuriosamente frente a mí y luego, con una sonrisa venenosa, declaró que Sofía tenía una piel increíblemente suave y que visitaría su habitación con frecuencia. Mi propia familia adoptiva, los Sánchez, me miró con servil alegría, ignorando mi dolor y vendiendo mi humillación sin dudarlo. Sofía, la mujer que amaba, me pidió con fría determinación que aceptara mi destino como un "cornudo por el bien de la familia". Un golpe que me lanzó al suelo, pero el verdadero golpe vino cuando mi "padre" adoptivo, el señor Sánchez, me azotó con un látigo, mostrándome que yo no era más que un perro guardián, un peón en su ascenso social. Me obligaron a aceptar el compromiso, a ser el marido de conveniencia, la fachada para su infamia, con la amenaza de horrores peores si me negaba. La rabia me consumió, el dolor afiló mi mente, y me di cuenta de que no solo querían humillarme; querían deshacerse de mí una vez que cumpliera mi propósito. Justo cuando la desesperación me invadía y planeaba huir, apareció Isabela, una princesa de sangre real, con ojos violetas y una propuesta inesperada: "Usted y yo tenemos un enemigo en común". Ella me ofreció una alianza, un plan para exponer su perversión y derribar al príncipe y a la familia que me había traicionado, transformando mi humillación en el arma más letal.

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La palabra de Dios te bendice

La palabra de Dios te bendice

4.9

En esta ocasión estaré reflexionando en base a algunas historias biblicas, que promuevan una fe viva en Dios, y la comunión de cada día con el Señor. Encontrarás respuesta al sentido de la vida, mediante la relación de invitar a nuestro salvador y Dios, para formar parte de nuestras vivencias, así comprendera que la obediencia al señor ayudara a encontrar la paz y la felicidad en jehova Dios.

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Viajando por la Vida

Viajando por la Vida

5.0

Esta historia es la vida real de un hombre que nació en la extrema pobreza y durante su viaje por la vida las cosas cambiaron para convertirse en un hombre de emprendimiento, durante este tiempo conoció a muchas personas importantes de las cuales aprendió y admiro, así mismo se convirtió en alguien con el deseo de compartir sus aprendizajes y comenzó a dar charlas de emprendimiento, asesoría y disciplina financiera. Su nueva vida le permitió viajar por muchos países del mundo incluido el viejo mundo e Israel que era su sueño más anhelado, los países que viajo eran al rededor de treinta países y su lista seguía aumentado, pero para mientras hacía esto su vida transcurría de forma sencilla y de bajo perfil, esto debido a que recordaba sus inicios en la niñez y no quería levantar envidias entre sus conocidos . "Viajando por la vida" es una historia sencilla pero apasionante de experiencias que el autor vivió y comparte en esta historia, la cual en un manuscrito para la familia, originalmente se escribió como: EL ÉXITO DE Mi ViDA", el autor escribe principios incrustados para tener una vida de éxito

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El Rosario y la Traición

El Rosario y la Traición

5.0

En la vasta y apacible Hacienda "La Esperanza" , Elvira creció como una princesa, colmada del afecto desmedido de su tío, Don Ricardo, su único protector tras perder a sus padres. Pero la noche de su mayoría de edad, un acto de amor prohibido y la intrusión de un rosario sagrado transformaron a su benefactor en un verdugo, exiliándola sin piedad a un internado infame. Tres años de horror insufrible forjaron cicatrices invisibles, y al regresar, la encontré sumida en un purgatorio doméstico, bajo la indiferencia glacial de mi tío y la cruel manipulación de su prometida, Sofía. ¿Cómo pudo el hombre que me adoraba caer tan ciego ante la maldad, al punto de permitir que me desollaran viva, y aun así creer las infames mentiras que me hundían cada día más? Ahora, la verdad velada por el fuego y el dolor insoportable ha empujado a Elvira al abismo; pero desde el más allá, su espíritu despierta, marcando el inicio de una ineludible y sangrienta caída para quienes la traicionaron.

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Ladrona De Mente

Ladrona De Mente

5.0

El eco de la sirena de la ambulancia aún perfora mis recuerdos. Un listón suelto, según ellos. Mi carrera de bailarina, mis sueños en el Festival Nacional de Danza Folclórica, se hicieron pedazos junto con mi tobillo. Pero la verdadera tragedia fue ver a mi madre, mi única familia, consumirse por el dolor y la injusticia de todo lo que me hicieron. La enfermedad que se la llevó fue un veneno lento, goteando de cada titular que me acusaba de mi propia "negligencia". "La joven promesa, Sofía, descuidó su propio vestuario en un acto de irresponsabilidad imperdonable", repetían, mientras Catalina sonreía, inocente, detrás de su fachada de preocupación. ¿Cómo podían creerles? ¿Cómo podían culparme a mí, la víctima, de mi propia desgracia? La desesperación me llevó al borde, pastillas en mano, una carta de despedida a un mundo que me había traicionado. Pero la oscuridad no fue el final. Un parpadeo. El olor a laca. El murmullo del público. Mi tobillo, perfecto. "¡Sofía! ¡Sales en cinco minutos! ¿Estás lista?" Había vuelto. No era un sueño, ni el más allá. Era la noche del Festival, mi segunda oportunidad. Y esta vez, no caería en la trampa.

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Convertido en robot por amor

Convertido en robot por amor

5.0

My boyfriend said I was immortal and asked me to exchange my life for his first love. I agreed. He didn't know that I had already died after the exchange. But it's okay, I have a system. He promised to accompany me every year on my birthday, and I would gain a year of new life. Next week is my birthday, and the system allows me to stay as a robot and wait for resurrection. But he forgot about me completely. On my birthday, he was out with his first love and the news of their engagement went viral. He sent me a message warning me: "If Xi's health is not good, we will have a wedding to fulfill her wishes, and you are not allowed to cause trouble." But how could a dead person cause trouble? However, he went almost crazy when he saw my mechanical body.

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Los Demonios Adoptivos

Los Demonios Adoptivos

5.0

El fuego me consumía, pero el verdadero infierno era el odio de la multitud. Atada junto a mi esposo, Ricardo, escuchaba los gritos de "¡Bruja! ¡Monstruos!", mientras el olor de nuestra carne quemada inundaba el aire. En mis últimos alientos, no sentí las llamas, sino la helada traición de Camila y Renata, las hijas que rescatamos de un orfanato, a quienes dimos todo. Ellas nos habían pagado orquestando nuestra ruina, acusando a Ricardo, estéril, de embarazarlas. Observé cómo el jurado de la turba dictó su sentencia con gasolina y fósforo, y morí con una sola pregunta que me desgarraba: ¿Por qué? Y entonces, desperté. El sol entraba por la ventana, mis pies descalzos sobre el frío suelo sabían a renacimiento. No fue un sueño, era una segunda oportunidad. El calendario marcaba el 15 de agosto, el día de la cita médica que lo cambiaría todo, el inicio de su mentira. Sabía que nos acusarían de nuevo, que la prensa nos devoraría y la turba nos condenaría. Esta vez, no permitiría que destruyeran a Ricardo, ni que nos arrastraran al infierno de nuevo. Conocía cada uno de sus movimientos, cada una de sus mentiras. Ya no era la ingenua Sofía, la que solo tenía sentimientos. Esta vez, estaría preparada.

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La Elegida Olvidada del Sol

La Elegida Olvidada del Sol

5.0

El gran salón del palacio rezumaba incienso de copal, denso y pesado, mientras cientos de nobles se congregaban para la ceremonia que sellaría el destino del imperio. Yo, Xochitl, la "Elegida del Sol", estaba a punto de ser consagrada como la esposa principal del Emperador Itzcóatl, uniendo nuestros linajes sagrados para asegurar décadas de prosperidad. Pero al mirar a Itzcóatl en su trono, solo encontré un desprecio gélido. "¿Realmente creyeron que me ataría a esta farsa?", su voz resonó, "¡A una mujer cuya única virtud es un cuento de viejas!". Inmóvil, con la túnica ceremonial blanca como una mortaja, mi corazón latía con el eco doloroso de una vida pasada. Porque ya había vivido este momento, ya había sentido esta humillación, y sabía su desenlace. El recuerdo me golpeó como un rayo: en mi vida anterior, había suplicado entre lágrimas, recordándole el pacto ancestral. Él se había reído cruelmente, repudiándome y entregándome a sus guardias como a un animal. Mi familia, protectora del pacto por generaciones, fue acusada de traición, sus tierras confiscadas, sus nombres borrados. Todo, por el ciego amor de Itzcóatl hacia su concubina, Citlali, quien ahora sonreía con triunfo a su lado. Mi final fue brutal: abandonada en una fosa helada, morí de hambre y frío, con las risas de Citlali susurrando: "El sol te ha abandonado, Xochitl". Pero los dioses no me abandonaron; el pacto era real. Me concedieron una segunda oportunidad, no por piedad, sino por equilibrio. Desperté gritando hace unos días, justo a tiempo para revivir el inicio de mi caída. Pero esta vez, no había lágrimas ni súplicas. Solo un vacío helado y una determinación dura como la obsidiana. "Mi Emperador", dije ahora, mi voz sorprendentemente calmada, sin rastro de la emoción que me consumía. Levanté la vista y lo miré directamente a los ojos. Itzcóatl se desconcertó, esperando histeria. "¿No tienes nada que decir, mujer? ¿Ninguna súplica a tus dioses falsos?". Su arrogancia era palpable. Citlali se aferró a su brazo, su preocupación fingida. "Mi señor, no seas tan duro con ella", dijo con voz melosa, "Quizás cree en esas viejas historias; no es su culpa ser tan ignorante". Sus palabras, veneno envuelto en miel, antes me enfurecían. Ahora, las recibí con una serenidad que los descolocó. Hice una reverencia profunda, una sumisión que contradecía la tormenta en mi interior. "La sabiduría del Emperador es tan vasta como el cielo", dije, con sinceridad vacía. "Si mi presencia y mi linaje son una farsa, entonces no soy digna de estar a su lado". El silencio en el salón fue absoluto. "Me retiraré a mis aposentos y esperaré el juicio del Emperador", continué. Itzcóatl frunció el ceño; mi sumisión lo desarmaba. "¡Vete!", espetó, "¡No quiero volver a ver tu rostro!". Caminé hacia la salida, mi mirada se cruzó con Cuauhtémoc, el líder de los guerreros águila, él creía en el pacto. Mientras pasaba, Citlali soltó una risita cristalina, y él la rodeó con sus brazos, su adoración ciega. La escena quemaba en mi memoria, una réplica exacta del pasado. Pero esta vez, el dolor no me paralizó, alimentó la llama fría en mi pecho. Los dejé en su nido de amor y ambición. No volvería a suplicar. Esta vez, simplemente me haría a un lado. Y observaría cómo el imperio, cuya prosperidad dependía de mi sangre, se desmoronaba hasta convertirse en polvo. Y él, el gran Emperador Itzcóatl, se arrastraría sobre esas cenizas, suplicando por la farsa que ahora repudiaba. Esa era mi nueva meta, mi única razón para esta segunda vida. No buscaría venganza activa, solo dejaría que la verdad se revelara a través de la hambruna, la sequía y la desesperación. Mi venganza sería la propia caída de Itzcóatl.

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Vivo Por Sí Misma

Vivo Por Sí Misma

5.0

El olor a aceite quemado y ese humo picándome los ojos fueron la primera señal del infierno que vivía. Mi padre, un chef aclamado, me miraba con esa decepción familiar, no por el desastre en la sartén, sino por mí. "Camila solo estaba aprendiendo, tenías que ser paciente con ella", decía con una voz tranquila que me aplastaba. Mi hermana, Camila, lloraba lágrimas falsas, un truco para ganarse a papá, mientras yo callaba la verdad de su sabotaje. Para mi padre, mi talento no era un don, sino una carga, una deuda perpetua con mi mediocre hermana, a la que había que "nivelar". Una vez me dijo: "No es justo para Camila que tú siempre seas la mejor". Así crecí, mi esfuerzo castigado, la mediocridad de Camila premiada, viviendo con una ansiedad que mi padre llamaba "drama". Cuando fui aceptada en la mejor escuela de gastronomía, y Camila no, mi padre tuvo la "solución justa": "Vas a cederle tu lugar a Camila, es tu deber como hermana". En mi furia, le grité que su "igualdad" me había enfermado, y él, en un arrebato, derramó café hirviendo sobre mi mano. Camila, con una sonrisa satisfecha, me soltó: "Para papá, tú y yo siempre seremos lo mismo, no importa cuánto te esfuerces". En ese instante, algo se rompió dentro de mí: el amor, la esperanza, todo. Esa noche, con la quemadura hirviendo en mi piel, empaqué una pequeña mochila, sin rumbo fijo, solo con la certeza de que debía irme o moriría. Me paré en un puente, al borde del abismo, mi teléfono vibrando con las amenazas de mi padre: "Vuelve a casa ahora mismo, Sofía, no hagas esto más difícil". Pero un desconocido se acercó, revelando sus propias cicatrices, y me dijo: "Tu vida es tuya, no dejes que gane, no les des el gusto, vete de aquí, pero vive". En ese momento, mi padre me encontró, y mientras me sostenía la mano quemada, me advirtió: "Me has hecho pasar una vergüenza terrible, arreglaremos esto en casa". Pero ya no había "nosotros", ni "hogar". Encerrada en mi cuarto, hice lo único que quedaba: marqué un número prohibido, el de mi tía Elena. "Tía Elena, soy yo, Sofía... ¿puedes venir por mí?". Hubo un silencio atónito, luego, sin dudarlo, ella respondió: "Claro que sí, mi niña, voy para allá ahora mismo".

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