ponde al timbr
llamándome. Miré mi brazo aún acostado y ese maldito tatuaje de serpiente es
era real?! ¡¿Y ahora?!
ena por toda la casa haciéndome alerta
uelo, busco los objetos de la caja y los v
todas las pertenencias dentro de la c
la sudadera del uniforme que estaba en el suelo. Tiro de
de la pared cerca de la cabecera, y sin perder tiempo baj
r corriendo del ático. Mi madre me sorprendió
con el pie en busc
nas fotos antiguas." Inve
llevas esa camisa de manga larga c
n, en realidad, pero voy a lav
osa de ser
go, no estaba muy convencida de mi respuesta. Me pone la mano en la frente y el cuello
sospe
e s
saron en el desván. Eran demasiado surrealistas para que
tré en el ático, y hay una serpiente gigante
logía griega, ¡y descubrí que allí era la hermana de Medusa! ¡Qué genial, verdad! M
a, pero el din-don volvió a sonar y escuché
es? Yo
yo, Ro
er los estribos. Cada vez que ese chico se acerca
mediato para no lucir desordenada, re
Oy
on fingida sorpresa m
rigo me dio su mejor sonri
aquí? Pregunt
e tuve la necesidad de verte, ah, también vine para asegurarme
ando lo decidido que estaba en lo
onfirmé, abriendo una amplia sonrisa cuando noté
quería pensar en la idea de
izo Rodrigo f
pero era imposible n
almorzar. - digo despidiéndolo, n
do su cuerpo con el mío, tentador, pero necesitaba des
s! Digo, dándole
nces! - dice
ari rojo, hambriento y ansioso por más tar
ho a mi madre preguntar mientras co
un
querer deci
nvitaste a almorz
. Miento, tratando
? Deja de poner la mesa y me
, lo
gar con cosas al azar en l
, ¿verdad? Sé que se mueve, mamá
safortunadamente ella la tenía. Rodrigo me conmueve
pongo muy tonto cuan
supo lo que es tener un boleto pagado con su propio esfuerzo? ¿Hola? Martina,
ue ver
os amigo
azul marfil que nunca antes había usado, con tirantes finos, un escote en v que resaltaba mis pechos media
toy preparado para ese tipo de conversación, especial
mi balcón para confirmar si era él con ese hermoso Ferrari
así ponerme un poco más difícil nunca le haría nad
o yo
sentido. Lo castigué durante
s. Por suerte para mí, mi madre se había ido a la cama más temprano, lo que me permit
onita eres! dijo,
e dio la vuelta, y con su mano apoyada en mi espalda, me
hé el cinturón de seguridad par
queda lejos de aquí. ¿T
o quiero llegar demasiado tarde
a usted, se
omedio de personas en el lugar, todas con ropa elegante,
y eso me demostró que somos totalmen
isimular la incomodidad de estar
gustó? -
ble. Traté
día que
lgún día -declaró, y lu
té apoyando mis ma
hacia abajo y luego a mí - Este lugar es muy espec
teralmente
dificultad para abrirse a la gente. Tal vez estaba pasando por
pero fui interrumpido por el
no? -
guntó Rodrigo, luego se volvió hac
onfirmando asinti
utos, todavía reflexionando sobre lo que había dicho antes de que el cantiner
total silencio y con una sensación de
serena e inspiraba amor. Lo cual me lle
ar? Digo, toman
dijo
uces de colores cambiaban de color al ritmo de la música, suaves y cálidas. Las manos de Rodrigo aterrizaron en mi ci
amos solo nosotros d
rmosa, ¿lo sabías?"
iéndome esas cosas, más aún en medio de un sensual baile,
as ganas de
erpos, lo miro a los ojos y veo claramente el deseo en ello
siado cerca de los míos, afloró la ansie
tento de besarme, inmediatamente me re
o! Rogué un po
da. Espero el tiempo que
s intensidad que yo estaba un poco de
sentía lista para dejar que sucediera. No sabría explicar por q
erdad. Gracias al gran Saulo, no podía relacionar
stado de ánimo pensativo me hizo quere
tá b
ando su billetera de su bolsillo
uiera me arriesgaría a imaginar cuánto límite había en esa tarjeta negra,
nos alejamos, esta vez
reguntó mientras doblaba la
mirándolo, que conducía sin ap
de mi vida, aunque duró t
ero pinchazo por
n. Lo siento, n
z entonces? - dijo y yo asentí -
ase. Respondí, cortando cua
eso?" Mira, no es por nada, pero teng
Quiero ir a casa. Bostecé, m
o, ya no le gustab
en hasta que Rodrigo detuvo el a
uviste aquí? Emp
cara con cuidado. Sintiéndolo más raro, tal
zó hacia mí, tratando
del mío y le di una bofetada justo después - ¿Qué es eso? -g
ndo estoy cerca de ti. No tienes idea de cuánto me contuve to
onmigo. No quiero verte más, ¡adiós! - Le
r fa
nas! - suplicó haciendo
actitud escrotal que había tenido conmigo. Arrancó el auto, sin te
do en ese momento. Llegué a sentir un poco de lástima por él, pero me molesté mucho y lo dejé irreductible.
lo que me
tema y en cuestión de minutos lo hace? Me gustaba tanto, pensé que s
una toalla, cansado del d
nuevo arrastrándose por las paredes cubiertas de carteles de bandas. Art