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Historia

Capítulo 4 IV Teresville

Palabras:1308    |    Actualizado en: 07/01/2023

a un poco de la rabia que sintió tras el horrible sueño, pero una vez en calma, analiza un poco la situación y sin darse cuenta ya estaba formando parte de aquellos que odian

horas y empieza a llover mientras caminaba por los largos trazos de bosque frondoso, logra ver un claro a lo lejos donde reconoce varios manzanos y su boca comienza a deleitar el sabor, también, comienza a visualizar una vivienda que pareciese ser de un cazador ya que reconoce su pequeña curtiduría y cabezas de anim

celeste. Sherek ve a su alrededor y nota que hay otros edificios gubernamentales, viviendas y tiendas tienen flores de distintos colores pero el más predominante sigue siendo el celeste, también se da cuenta de que escasean únicamente las de color morado, amarillo y rojo; aquellas con las que más se había topado por los bosques. Mantiene su mirada en los grandes adornos de la plaza central; fuentes relu

e te ofrece? -Responde la ancian

esta linda ciudad, las flores son aceptadas, ¿Por

más; pero al mismo tiempo existen aquellas que aparte de sus hermosos colores y energías nos llenan de orden y tranquilidad. Las celestes que estás viendo por ejemplo, me las trae siempre m

le den tanta satisfacción, ¿Pero con

ica-. En Teresville hay leyes muy estrictas con este tema, pero no puedo evitar coment

dias últimamente, debido a mi ignorancia sobre estas plantas, y tan

para dársela mientras le dice-. Fácil muchacho, solo ten esta y cont

su consejo señora,

arla en el costal junto a las demás. Sigue adentrándose más y más en la ciudad hasta que ve fina

a mesa, una naranja, una roja, una morada y la celeste. Escucha como las personas en la taberna lo observan y comienzan murmullos,

lores? -grita Sherek mien

a la taberna, entre algunos de ellos se escucha. -¡

o! -comenta un borracho mie

s! -grita un anciano que repo

ensuciarnos -agrega un Herrero que le miraba

, basura, escupitajos, y un par de mercenarios le bloquean la salida. Sherek coge su escopeta, tembloroso y mientras intenta apuntar a uno de los mercenarios el otro se la arrebata tirándola lejos, Sherek le

- Mátenlo de una buena vez par

el cervecero desde el mostrador donde obse

o y lo levanta. -¿Que se supone que vien

scubrir para que sirven y evitar q

ritándole el borracho-.

, le prometo que no volveré a tener esa impru

enario mientras lo suelta de golpe-. Recoge tus

é preocuparse por eso, no

mercenario-. Aleja tus sucias cosas

personas en la taberna, aun así logra salir ileso y se aleja lo más posible de ese establecimiento,

en y allí adentro fue un caos total. ¡Pudieron haberme matad

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