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os que vieron que me llevaba y no hicieron nada, a todas estas un pensamiento se cola en mis maldiciones ¿Por qué? Volteo a verlo

con mi voz rota

cruzado mi camino –Lo dice con tanta normal

go con mi mirada baja sintiéndome derrotada, sintiéndome como si mi

tu piel o todo de ti, pero me gusto absolutamente todo de ti al instante –Intento colo

me puso el trapo en la boca y nariz, trate de luchar pero fue imposible él es mucho más alto y fuert

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tación espaciosa y lujosa, no distingo si es de noche o ya es de día, lagrimas amenazan con salir y aún sigo si

o no creo que este sea el caso, ¿Cuáles son las cosas buenas me traerá vi

elas de la habitación es abierta y el entra, mi cuerpo se encoje en la cam

sonrisa maliciosa, no respondo na

su rostro, veo que apretó su mandíbula y una vena resalta en la fr

más podría esperar de un secuestrador? ¿Debo esperar que sea amable conmigo? obviamente eso no va a pasar, siento en mí un

hable me respondes de inmediato ¿De acuerdo? –Asentí, las lágrimas no se hi

ue un gemido de dolor salga de mi boca a lo

dejándome fuera de sus manos dejando sus d

aces una tontería e intentas escapar le vuelo la cabeza a tus padres ¿Entendido? –Asentí, corto la poca distancia que había y beso mis labios, intente alejarme pero este me agarro del cabello fuertemente –No vuelvas a

lena de rabia hacia él, no quiero estar aquí, más bien no quiero estar con ese homb

mucho la cabeza, no quiero estar aquí, pero no puedo escapar por el bien de mi f

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equivoque, es una mujer de unos cincuenta y siete años, al verme su cara re

–Lo siento tanto por ti pequeña niña, que dios te proteja

ber si esa persona me ayudaría o lo ayuda

os cayendo en cuenta que si ella es su nana ella lo vio crecer y no pude imaginar que esa ab

oluntad, si me ayuda me matará, a mi, a mis padres e incluso mis hermanos ¡

entras me decía esas palabras en su rostro se veía tristeza, ahí supe que ella no me podría ayud

ios no me lleno de belleza por qué sabía