lla
mi cuerpo comience a pedir lo que antes recibía, me dirijo entonces a la cocina a preparar mi desayuno, me siento alegre, coloco música en el celular, hace mucho no daba "play" a la carpeta, siempre me ha gustado mucho la electrónica, su ritmo se entrelaza con los latidos de mi corazón,
pido mi desayuno y tomo mis pinceles y comienzo a trazar nuevamente pinc
úsica es interrumpida por una llamada, abro mis ojos y salg
¡H
ck cómo
ián, bien...
esperaba otra llamada?
que...
orzar, no puede negarse, hace mucho no sale de es
tengo planes, ¿D
no iremos
¿Quién más
. o ¿quieres que
taba, pero bueno, ¿e
pm en el restaurant
de s
ero hablarte de
ue
je espera
quilo
que será aquello "importante" de lo que Julián quiere hablarme.
*
nte y allí estaba Julián junto a una
s se levantaba de la silla y
ián! –
phenie –señala a l
pone en pie y me d
u mano, sonrió–, y bien, ¿a
quiero pedirte algo... bue
sonaron muy
¿Q
e seas nuestro padri
oco asombrado
endo... que te
í! –
abrazo– ¡felicidades! Ya te am
do lo que quiera –lo d
ieron? ¿Cuándo fue la propuesta? ¿Cómo fue? ¿
n– pero primero pidamo
*
podía procesar toda la info
e encerrado e
uería quedarse, no se arriesgaría a morir solo, solté la carcajada mientras abría la puerta, pero al entrar volví a pensar en lo que acaba de decir... y me di cuenta que era yo ahora el que estaba solo... solo me desanime u