img Mi Imperio, Mi Hijo, Mi Nuevo Amor  /  Capítulo 3 | 13.64%
Instalar App
Historia

Capítulo 3

Palabras:1023    |    Actualizado en: Hoy, a las 15:43

un dolor profundo y hueco. Las palabras de Alejandro, las burlas de Cristy, se arremolinaban en mi mente, una niebla tóxic

ty no fueron solo venganza; fueron una declaración. Una promesa de que n

cer pintando franjas grises en el cielo. Para cuando el sol salió por completo,

ciéndome dudar si siquiera contestaría. Probablemente pensó que

asa, An

je, mi voz tranqui

omento de

y ocu

gudo en mi tono. -Pero esto nos concierne a ambos. Y t

, esta vez

e exasperación en su voz.

ar, una voz suave y aguda

Era Cristy, su voz débil, frágil, claramente destinada

andro bajó, de

muevas. -Hablaba como si yo no estuviera escuchando, como si no acabara de decirme

añó ligeramente, una nota de advertencia en su voz, pero

ty g

Mi cara... ¿y si ya no me encuentr

o, del tipo que no me había mostrado en años. -Eres perf

la garganta apretada, un dolor ardiente subiendo por ella. Nunca me habló así. Ni una sola vez. No en ocho años. La revel

ume de Cristy. El olor me revolvió el estómago. Tuve que luchar contra las ganas de vomitar. Iba vestido con un traj

mientos deliberados, y coloqué un sobre

ana, desprovista de emoción

un atisbo de su ar

nastasia? ¿Más pr

l sobre

uerdo de

dosamente construida resquebrajándose. Miró el document

s bro

rada, mis prop

estoy bromea

cureciéndose con cada línea. Luego, con un rugido furioso, a

ivorciaré de ti, Ana

teñida de un nuevo tipo de do

onido áspero

stasia. Bajo sus leyes. Es... complicado. -Saboreó la palabra,

Leo abrió, su rostro grabado con preocupación. De pie allí, frágil y pálida, estaba Crist

-gimió, sus ojos grand

lado, su furia anter

n una ternura que me retorció un cuchillo en las entrañas. Realmente se preocupaba por ella. Yo era solo una obse

altando de mí a Alejandro y de vuelta. -Tengo algo imp

ró, su expresió

es, mi

orosamente, sus ojos clavándose en los mío

tu hijo... el hijo de

mundo giró. ¿Mi hijo? ¿No de A

, mi voz cruda y desespe

ándose al brazo de Aleja

eron... ¡dijeron que es verdad! ¡Dijeron que debería

ó bruscamente hacia mí, sus o

a. -Una prueba de paternidad será. -Chasqueó los dedos, y un

añicos. Le creyó.

Instalar App
icon APP STORE
icon GOOGLE PLAY