agado a la familia de la víctima. En vista de que
y frío mensaje de texto de él que decía: "Kylee no se sien
chica se quejaba de algo y Evertt la consolaba pacie
una voz familiar.
muy abiertos por la preocupación al ver mi cara magul
sonrisa y dije: "Todo
, con un tono medio bromista. "Si alguna vez estás l
e los guardaespaldas de Evertt, se acercó y empujó con fuer
e de Daniel y pregunté: "¿Qué
ija en mí y la mandíbula apretada. "Solo te est
o hombre, cuya expresión era fría y dura.
o: "Vamos". Me llevó lejos, ignorando mis forcej
l olor a whisky era abrumador. Tropezó y cayó sobre mí en l
con todas mis fue
quejó, intentando ag
lpe, diciendo con frialdad:
por un instante. Aproveché el momento para emp
lí estaba Kylee, con los ojos entre
lmarme y dije: "Se eq
tranquila. "Deberías llevar
ntarse, con una mirada descon
e el desayuno, Kylee se quejó
lo cambió por el mío. Yo no dije nada
mezclado", dijo él, sin mirarme
. "Hay gente que no soporta ver felices a los
iendo su avena, f
e y sentí asco, pues es
nedor y salí de
o la puerta se abrió de golpe, y allí esta
¿Te sientes culpa
Por qué iba a sentirme culpable? No voy a
la cabeza contra la esquina de una cómoda y sentí un p
da y dije: "Me voy pronto. Ten
no me creyó. Oí pa
en un instante. Se desplomó en el suelo, agarrán
Vio a Kylee en el suelo y a mí, con sangre
con lágrimas en la cara. "¡
o a la cabeza, que aún sa
tá en el suelo?". Les dio una orden a sus guarda
erta se cerró de repente, sumiénd
ientras viejos y aterradores recuerd
era quien solía abrazarme durante los ataque
temblorosa: "¡Déjenme salir! Por
me senté en el suelo, clavándome las uñas en las palmas de las manos, como trat
entrecortado e histérico, mientras l
e me había encerrado ahí. Mi salvador era mi