Joel Asante. ¿Está por aquí?", le preguntó Th
mostrador hasta que una mujer a su lado chistó y la miró con desagrado. Sonrió a manera de
. Suite trece. Tome el ascensor hasta
halassa, dándose la me
so que daba hacia el ascensor. ¿Po
abía que ella no la había querido desde que comenzó a salir con su hijo,
a que los firmaran para ganarse su aprobación, no lo dudó ni un segundo. Pensó qu
entos. Al ver que Karen Blade, su mejor amiga,
pidió tu suegra?", inquirió la
pero siento que algo no está
gas algo muy sencillo para ganarte su aprobación. No
contestó la ot
uertas se abrieron lentamente. Thalassa salió y caminó hacia
, y estaba a punto de tocar de nuevo, cuando la puerta se abrió de repente, revelando a
eguntó la joven, con el c
que a todas luces pretendía ser encantadora. "Y
nte en la sala de
or", le pidió el hombr
allí por las firmas, pero al recordar a su suegra d
¿Champán, vino o cerv
s. Lo único que quería era que firmara el contrato para poder irse
na copita no te caería ma
n, sin molestarse en ocultar su desagrado. Acto seguido, sacó una carpeta de su bolso y se la en
bía en los documentos. Su suegra le había advertido que no la
carpeta que ella le ofrecía y la abría. Comenzó a cam
que el hombre todavía estaba sin camisa. Y le daba la impresión de q
timbre comenzó a sonar. Joel abrió inmediatamente la puerta, y un segundo
siado bajo para no ser considerado peligroso.
exclamó ella, levant
n problemas. Caminó hacia él, con la intención de abrazarlo, pero justo c
Thalassa, miránd
ra entró en la habitación y, al verla, su ha
lo que mi familia ha hecho
esar esas palabras, una fuerte c
preguntó Thalassa, mirándola estupefacta,
casaron hace un año, nos has estado robando propiedades, ¡malversando millones de n
preguntó la acusada, co
ncargara de que este hombre firmara los documento
adora. "Kris, no conozco a este hombre. ¡Te lo juro! De hecho, ¡nunca lo había visto! Créeme, por
da. Luego, se dirigió a su hijo, quien mantenía una expresión estoica mientras mir
su interior, su rostro se oscureció. Cuando finalmente contempló a Thalassa, su mira
mblarle mientras leía algunas partes del documento. Todo se trataba de mover dinero discre
cabeza. Finalmente se daba cuenta de lo que sucedía: ¡la
tando de agarrarlo de la mano, pero él se apartó. "Tu madre me dijo que no l
ió, acercándosele mientras la miraba a los ojos. "Justo cuando pienso que no puedes decep
n se quedó allí, demasiado aturdida para reaccionar. Ella s
les, en
ías entrando a la habitación. Luego miró a Kris. Seguramente
, recibió s
los", indicó su espo