da junto a mi cama, con los brazos cruzados, su pie golpeaba el suelo con impacien
conservaba de mi vida anterior, una foto mía y de Miguel, tomada el día antes de que él se fuera, ambos sonreíamos, abrazados, él me había pr
mueca de disgusto puro, caminó hacia la mesita de n
a," siseó, su voz era veneno, "Miguel está muerto, ¿e
to del marco, la hizo pedazos con una furia que me dejó parali
í, tan fuera de control, tan llena de odio hacia el recuerdo de mi hermano
o si alguien hubiera apagado un interruptor, sus facciones se suav
cer eso, es que me duele verte sufrir, todo lo que hacemos es por tu bien,
el cambio repentino en su comportamiento era más aterrador
la ventana se reflejó en su muñeca, justo debajo de la piel, vi un destello, un pequendo de entender lo que había visto, ella notó mi mirada
untó, su voz con un
l pánico que sentía se transformó en un terror frío y absoluto, la mujer frente a mí, la que me había cri
n después de que Miguel desapareció, los qu
leó, tratando de procesar la monstruosa verdad, ¿quiénes eran? ¿qué
mi cara, su máscara de amabilidad se desvaneci
ra plana, sin emoción, "Javier nos espera, no vas a arruina
mi cabeza, no como una madre preocupada, sin
cha para que no viera mi expresión,
ía como ceniza en mi boca, "tienes r
mente estaba sorprendentemente clara, ya no era una niña asustada, era la herman
del terror, tenía que fingir, obedec