el dolor en mis costillas era una brasa ardiente q
ió sobrehumano, logré ponerme de pie, ap
iraba a mi
la entrada princ
ta, despidiendo a los últimos inv
e vio, su rost
?", siseó, asegurándose de
je con voz ronca, el dol
para sonreírle a un invitado que salía, "Yo me quedaré u
la volvía a entrar en el brillante mundo de Vargas, u
taxi y darle la dirección de mi
el camino er
la casa estaba
taba escuchar su voz, asegurarme de que estab
do la llamada se fue dire
nuevo, y de nu
ni
los hospitales, a la policía,
sabí
o de salir corriendo para
úmero de
contesté, con el c
uz?", dijo una voz ofici
soy
mento informarle... que hemos identificado
resbaló de la ma
do se
o se des
mi garganta, un aullido de pur
equeña herm
s, un atropello y fuga, e
a que no era
ra. Era
ron su
pies me llevaron de
inado, pero las luce
ue nadie me
uio a una oficina priva
estaba ent
aso
n enorme escritorio de caoba, y L
s brazos, riendo mientras é
botella de whisky y dos vasos,
ídamente con una mano, com
undamente irrespetuosa, que sentí qu
a puerta
se bajó rápidamente del regazo de
ciendo aquí?", exigió, su rostr
", dije, mi voz er
ón de Laur
o hubo horror, solo
un tono tan falso que era ins
ocupación, e incluso intentó
tan descuidada, debes es
mi voz ganando fuerza, "Me
rostro era una másca
u voz era un gruñido bajo, "Laura ha estado conmigo
ura, "¡Ella me amenazó! ¡Dijo que le har
doptando de nuevo s
jo, su voz temblorosa, "Siempre su
nterponerse entre Laur
"esposa" me supo a ceniza en la boca, "Ahora
n una mezcla de l
mujer maravillosa que solo ha tratado de ayudarte, ahora, lárgate de mi propiedad an
rotector, cómo ella se acurrucaba contra él, y supe que estaba com