nto de hadas, pero esa noche, en la gran finc
se casó con mi hermana mayor, Isabela. Dos hermanas con dos h
arismática Isabela, el amor de Mateo fue mi salvación. Él me adoraba, me ponía en
elicidad
n trato para salvar una parte del negocio que la imprudencia de Mateo
ino a cobrars
oso que no ocultaba su férrea voluntad. Mi hermana Isabela, pálida y hermosa en su viud
silencio. Su voz
dero de Lucas. El linaje de mi h
sus ojos negro
a concebir. Le darás un hijo que llevará el nomb
do que estallara, que la defendiera. M
giró hacia mí, su
Piensa en tu pobre her
ela era más lista, más guapa, más todo. Años de anhelar una migaja del amor
a, segura, valorada. Me había
ió su p
de golpe. Su voz
iego rotu
madre co
osa. Sofía es mi esposa. Jamás
u castigo sin pestañear: la prohibición de participar
Me aferré a su brazo, temblando de
quilidad de la noche
. Al pasar por el pasillo, escuché ruidos extraños que venían
guien, un trabajador de la finca, tal vez. La cu
habitación est
onces
Mi marid
a cama con
a mentira para mantenerme tranquila mientras, en secreto, cumplí