hija fue un esp
a lirios y a la hipocresía
o. Estaba al otro lado de la sala, sosteniendo a Carmen, la v
embar
lo s
ndro se adelantó. No para hablar de nue
encio. "Aunque hemos perdido a una pequeña luz, pronto recibiremos una
el mundo s
o de C
armen le había dado, ahora era solo un presagio de bu
arca de la familia, la madre de Alejandro, le dirigió a
na vez prometió amor eterno, ahora se sentía como un
ueño, pero para m
uenta. O a nad
de Alejandro, un hombre con cara de comadreja que sie
a? Alejandro todaví
espondí, y salí de la c
l aire era pesado, pero por primera v
que la puerta se cerrara. Seguramente ya estaban haciendo apuesta
n privado de Leo ya m
e la infancia.
de vuelta a la mansión. Entré por
a, encontré
rdenó, sin siquiera mirarme. "Los an
terrada, y él me pedía qu
pecho. Fui al refrigerador, saqué los tomates, los pimie
uras, Alejandro se apoyó
tiempo, "lo criarás como si fuera tuyo. Carmen n
Me sequé las man
",
Una risa co
¿Irte? ¿A dónde irías
mi delantal. Los había preparado un abogado q
divorcio,
o de tus dramas para llamar
entró en la cocina, con
iño, me siento
preparar y bebió un sorbo. Inmediatamente
has puesto a e
hacia mí, sus oj
le has
s solo g
tes!",
acho y me sujetó por el pelo, t
inofensivo,
cuello, entrando en mis pulmones. Luché, pero él era demasiado fuerte. El
Mi vista se volvió borrosa. Lo último que vi antes
-