hogaba otra vez,
rato, las risas brutales
ndo, bañada en
ya cicatrices pálidas, ardí
pequeño aparta
e ataba el tobillo a la pa
ra lujosa, pero
s con b
? ¿Cómo había
abrió y entró
adolescencia, el ori
a ternura que me
amor, des
bandeja con
a un desayun
os no eran tiernos. Era
ejandro? ¿Por qué m
eja en la me
su sombra c
a, Sofía. Siemp
mejilla, y yo temb
o, su otra mano agarró
gar todo lo qu
cegó por u
on contra los míos, un
fuerzas, pero la caden
paldas en
ernió s
, mi amor. Solo
ierno de nuevo, pero esta
re
a tortura, cada pal
ó, se levantó
ía. Mañana ser
bitación, cerr
mblando, las lágrimas c
Por qué me
ridad era su rostro en la calle, ce
ro casual,
, me había ofreci
nsada ese día
ep
estú
subido
o sobre mi boca, un olor
a aquí. Su
n mes. Un mes
or las mañanas y su viole
eno de moratones. M
lar con él,
jame ir. No diré nada, lo