ams yacía en la cama, con la respiració
a casa con un humor inusualmente alegre. Estaba lleno de energía y no se contuvo cuando tuv
a, ya se habían que
ojos ardiendo en deseo, y todo entre ellos s
z que terminó, ella fue la única que t
ba en la cima: le iba bien en los
os de matrimonio, siempre
ijos, pero en los últimos seis meses algo había cambiad
en la cama. Y, a veces, cuando él le susurraba pala
e que sus sentimientos hacia él habían cambiado. Pasó de
os, se había en
e manifestaba en la cama. Cuando no intimab
Oliver con voz monótona, sacándola de sus pensam
con la cabeza, sint
rracho, aunque se quedara embar
as le hicieron más daño
el pijama y c
ue lo perdió de vista, y f
sonido de un celular rompió e
er y miró la pantalla, donde
iempre era amable y elegante. Tenía un en
acía seis años solo para trabajar cerca de Oliver. Oficialmente, Millie s
el hombre apareció y
cálida al contestar, ll
si un cuchillo le at
u tono con ella siempre era fr
ando. Por favor, ven a buscar
smitió a través del celular, y Rosann
seguida a ayudarte. Busca un lugar seguro y bloquea la puerta. ¿Llamaste a
de rabia; ni siquiera se molestó en pon
rbios del norte con su equipo de televisión, su furgoneta se había salido d
ía muerto, pero todo
ngraba mucho. Presa del pánico
aunque la oyó llorar, respondió con frialdad:
sin pensarlo
o a ver a Millie, a pesar de que todavía estaba borrach
l celular mientras se dirigía a la puerta principal. Rosann
iver se marchara, se mordió el labio y dijo:
?", preguntó él, levantándole la b
, y contestó con voz firme:
ción", dijo Oliver de repen
, la empujó a un lado, haciéndola p
el hombre pasó a s
silencio y Rosann
rte que le retorció las entrañas. Le do
os ojos enrojecidos, mient
que le entumecían las piernas. Entonce
e se acurrucó en el sofá, cerrando los
ar rompió el silencio, y el tono
antó rápidamente y corrió del salón al dormitorio
ro por culpa de Millie! Le rompió una botella de cerveza en la c
hmed, estaba al otro lado de la l
ener la compostura y apen
llegar Oliver por esa chica, ni siquiera se habría sorpre
club privado más exclusivo de Qegan. Era el luga
testigos dijo que tenía chupetones en el pecho y que le habían bajado la ropa interior. Menos mal
de Leah, porque su mente estaba en otra part
e sueño que le quedaba, dejándola aferrada al celu
iba a enoj
durante la llamada, aferrándose a la ú
noticia de la pelea de Oliver en el Club Zero y
un hombre dispuesto a arriesgarlo todo por su amada
pudo soportarlo más, así que guardó el celu
ad, sintió que sus pen
ión. En cambio, se pasó el tiempo mezclándose con mujeres de diferentes cl
imonio con Oliver, que ya se estaba de
rrumpió sus pensamientos. Miró la hora
resó al dormitorio, sino que se
espiró hondo y caminó hacia el e
o resp
, luego, giró el
er era cortante y su expresión se ensombreció
eunió todo su valor para mirarlo a l