toda esperanza se desvaneció. El pasillo afuera
on los ojos cerrados y el rostro ceniciento. Las líneas en el monitor cardíaco ju
y estuvo a punto de desplomarse,
s esfuerzos!", gritó el joven, con los ojos en
ar esto", respondió Simon, con un m
ad lo invadía, haciendo que se tamb
ndió la mano para estabilizarlo, pe
era un niño pequeño, dejándolo a la deriva, hasta que la familia Evans lo encontró; en ese momento, ya cumplió doce años. Para
verdaderamente; ellos eran su ú
sollozos de otros familiares, aunque era
er el favorito de la abuela", s
aycob Evans, el medi
as sesgadas de su madre. Lo veía como un intruso que competía por la riqueza familiar, que él considera
que alcanzó la adultez, había dirigido con firmeza el negocio familiar, asegurando su lugar como el
nsignificantes, pero ese día, no tenía
verla", le pidió Glenn a s
zo y, junto a Derek, lo llevó al interior de la habit
eres el presidente?", se quejó Jaycob
átigo. Luego, se giró para clavar su mirada helada en su herm
e era el mismo diablo quien lo estaba mirando. Tr
l y su madre se habían deleitado atormentándolo. Sin embargo, el chico so
io como señal de debilidad, creyendo
con una determinación calculada e implacable. Y desde entonces,
lo observaba con una mez
o a la cama y extendió su mano temblor
tan pronto?", murmuró, con la
te a la inmóvil Jane. Mientras los llantos del anciano se
en un profundo silencio y todas l
crees que sabes más que el doctor? ¿Conoces a algún médico milagroso? Por si no lo sabes, el doctor Jacks
en entender a Allison, quien solía quedarse en la villa de su hijastro y solo se aparecía en las v
e se pasó los últimos tres años como ama de ca
ue quede alguna esperanza", intervino Lydia Eva
burlonas. Sin desperdiciar ni un ápice de atención en Derek, ni molestarse en
tó las burlas, y una nueva ola de
la respetaba y mucho menos la trat
lla, Derek permanecía callado, sin mover ni un dedo para defender
é podrías hacer tú para cambiar a
ignoró por completo a la mujer. Sin dejar de mirar