Hasta el último suspiro

o un respiro fresco para muchos estudiantes. La Escuela Preparatoria Zona B

la. Después de pasar todo el primer año en casa debido a la pandemia, finalmente iba a conocer mi escue

scudo contra el mundo, una manera de ocultar mis inseguridades. Salí de casa con mis au

é una respiración profunda antes de cruza

gnado, la presión y los nervios subían mucho más. No conocía a na

cabello finamente rizado. Logré ver cómo un señor le ayudaba con su mochila; supu

hablar, no pude evitar notar a la chica de antes sentada un par de filas adelant

todos los maestros te hacen presentarte una y otra vez. Es muy abu

ones del profesor, cuando sentí un toque en mi espalda. Vo

ella? -me dijo, extendién

a chica a la que debía pasárselo estaba justo enfrent

o te l

dí, devolviénd

el -d

ción continuaba, noté que Uriel y yo compartíamos algunas miradas cómplices cuando el profesor no estaba mirando.

a escuela. Hablamos sobre nuestros intereses, nuestras experiencias durante la pandemia y las expectativas para este nuevo año escolar. Aunque

s a hablar. Me contó más sobre la escuela, los profesores y algunos de los otros estudiantes. Po

, pero estar de vuelta en la escuela y hacer nuevos amigos como Uriel me dio esperanza para el futuro. Aunque llevaba cubrebocas para ocu

escubrir y ajustarme, estaba agradecido por haber conocido a Uriel y por sentirme un poco más integrado en esta nueva etapa de mi vida.