ó la sangre a la cabeza y respondí con un puñetazo en la cara. El impacto la hizo caer al suelo, pero se levan
Rebecca, lo hice. Dominé a Rebecca tirándola al suelo, trepando encima de ella y lueg
ura! suplicó cuando se dio cuenta
me sujetaron con fuerza para que no reaccionara, b
me ir! ¡Ayudar! Gri
- dijo Rebeca pegándome
vadiendo toda mi boca, mi labio inferior goteaba un ligero sangrado, luego miré lapearme de nuevo, nos asu
seria y autoritaria de Rodr
ervar la carne, mientras que la otra multitud que
nerle las manos en la cara, pero fue rechazada cuando é
oques!" -
te amo! - e
lo había dejado muy claro!
nas de su frente sobresalían ca
stras vidas? - Me culpó entrando en un estad
otros terminó mucho antes
nca reclamé ningún compromiso contigo!"
ria, a pesar de que Rebecca
esa gente que estaba allí. Todos comenzaron a burlarse de su cara, confieso que sentí pena por ella. Sintiéndos
ntando un amor
s con paso firme. Rodrigo me tomó del brazo y me levantó del suelo con un cuidado que no su
on su voz tan suave que no parecía h
igado!" Gracias
o queda nada entre nosotros. No sé por
á tod
e un poco demasiado duro c
gunas verdades. ', dijo, y luego bromeó. - P
l que estaban colgadas en la pared al lado del
sí, aterrorizará a e
a y te arreglamos allá arriba. - dijo, poniend
s comenzarán en un rato y es
Va
á mucha diferencia. - trató de c
je, sintiéndome o
odrigo juntó sus manos para sostener mi pie, cuando estába
a cuenta ni nos viera salir, nos mantuvimos agachados hasta el es
n realidad parecía un enorme palacio
que en varias ocasiones quedé deslumbrado por la belleza de aquel lugar. La casa era perfecta y tenía sirvi
s puertas de vidrio de su casa eran automáticas, ha
la bolsa de medicinas. dijo
ión y el lujo de los muebles mient
ives? pregunté
limpiaré esto. Dejó el maletín a mi lado, lo abri
ocupación frente a todo,
ar la herida, usando una de las gasas. Siemp
nerse un poco de maquillaje para disimu
resto a mí!"
, estaba literalment
tir alguien tan e
me besó suavemente. Lo agarré por la nuca acercándolo e in
o adecuado, pero me aferraba al hilo más delgado de la conciencia. En casa no había nadie más que los empleado
r y de todas las cosas que he escuchado. Pero nuestros besos nos encen
chas ganas de hacerte el amor y eso es a
ez. - Tuve miedo de escuchar a
prometo tener cuidado", ase
e quieres? -quería mi
onfirmé euf
nmed
con varias puertas, entramos por la tercera a la izquierda, cerró la puerta con llave y com
pa ahora, ¿de acuerdo
quitándose todo, dejando
rmo
nte por todo mi cuerpo, una estuvo sobre mi pecho, pellizcándolo y la otra descendió
, sacándome gemidos de la boca. Su mano izquierda que bajó por mi vientre llegó a m
a masajear mi punto sensible mientras chupa
quiero probarlo. dijo c
ones todo el camino hasta
o lo único que lo detuvo, comenzó a chuparme en mi punto sensible, haciéndome gemir con el toque caliente
ue jamás imaginé experimentar en toda mi vida. Me sentí mojada y no podía dejar de gemir mientras s
mientras me derretía de pla
dijo, lamiend
aban en mí, decidiendo que era mi turno de c
ntes. El sabor no estaba mal, era diferente pero bueno. Aunque era torpe en lo que estaba
a", su voz ronca puso la pie
a salvajemente y luego me v
cio y poco a poco hasta que te acostumbres, princ
majestuosidad, causándome una sensaci
tumbraba. Era delicioso ver su cuerpo sobre el mío, tomándome y hundiéndome más y m
abitación cada vez que aument
ana en todas las posiciones que me fueron posibles, ya que en algunas aún me dolía por haber perdid
puro éxtasis, pero
jor día de mí v
n. Dije, devolv
a darme una ducha, ya que estaba cubierta de s
es del auto. De camino a mi casa hablamos de lo que hicimos,
aginé mi primera vez
rlo hecho bi
ste geni
ra, en la puerta principal. Mi madre estaba en la sal
oy, hija!" dijo, preg
erminó tempr
nta de que aún eran
trapada en mi primera vez con Rodrigo qu
, dándose p
í hacia
casa. Me encantó pasa
uieras de nuevo, s
teléfono con la man
que cierre la puerta principal
odrigo? preg
ue él.
nca lo invit
d de eso. Voy a sub
o tonto, pero era mi primera vez y con un chico hermoso que creo que amo. Me acordé de Cryptus, en la ciu
ra al mundo real y conociera
endo las sensaciones de una mañana agradabl
e otra vez. Algo debe haberle pasado a
dre Forcis de que no envíe a
so. Vi a Medusa sentada en una mesa junto a la ventana, tenía la cabeza ga
vo firme en cuant
iniendo hacia mí. - Papá ya lo decidió, voy al
Acaricié su cabeza y pensé en un
ir al templo de Athena en absoluto. - Digo, preocup
padre en el
adre? Llamé
forma de una c
Te desp
ses! - elogió - ¿
otros castigos que puedes aplicarle, pero encerrarla en
Medusa cometió un
mana por pura malicia. Quería golpear a Esteno y terminó lastimando
o pa
- me interrumpió
Forcis no
usa en el templo. No había nada
una cosa más. - Pr
Pue
o ir!"