Garz

a notificación en el teléfono de Adrián, que yo no escuché,

a través de las vibraciones. Pero no contesté. Ni siquiera miré. Simplemente lo dejé sonar, y luego bloqueé su número. Después, lo eliminé de

, una figura irrumpió por las puertas batientes de la clínica privada. Adr

. Intentó tomar mi brazo, un gesto familiar de pos

nte. "¿Por qué no contestas tu te

, Adrián", dije, mi voz pla

. ¿Qué pasa? ¿Estás enferma?". Un destello de ge

pie. "Estoy bien. Solo e

. "¿Un chequeo? ¿Qué tipo de chequeo? Sofía, dime qué e

tando de soltar mi mano

la confusión. "Nunca vienes aquí para chequeos de 'rutina'. ¿Me estás oc

Adrián", dije, mi voz

ido corto y agudo. "Todo sobre ti es

minamos. ¿Recuerdas? Hace dos días. En nuestro

una fase. Hablemos de ello, como se debe, cuando no estés... como sea que estés ah

s brillante esta vez. "Sofía Gar

ndo mi brazo. No lo miré, simp

s detrás de mí. "¡Sofía, es

encontrando su mirada. "No, no lo harás", dije, mi voz fría y clara. Lueg