su primer día como asistente personal de Álex Martínez, el magnate detrás de la empresa que había estado observando desde lejos durante años.

tes de que pudiera hacerlo, la puerta se abrió de golpe. Un hombre de mediana e

eguntó el hombre, con

Álex Martínez -respondió ella, sin titubea

arriba a abajo, como eva

mucha calidez, pero con cierto respeto. -No te

rió, con

ne a trabajar. -dijo mientras le devolv

y desaparecer por el pasillo. Elisa susp

voz grave y autoritaria que siemp

pantallas de su ordenador. Al escuchar el sonido de sus tacones, g

utra, como si estuviera diciendo e

una sonrisa tranquila pero decidida.

era fría y distante, lo que era habitual en

eñalando una pila de papeles sobre la mesa. -Tenemos una reunión import

los hojeó con precisión, observando los detalles que otros tal vez habrían

la filial en Berlín. Hay discrepancias en los números, algo no cuadra.

nueva asistente fuera tan observadora ni tan segura de sí misma. Su act

lisa. ¿Estás segura de lo que est

ra directa, sin mied

concordancia con los datos que nos enviaron. No estoy sugirien

los papeles y luego a Elisa, sintiendo cómo un ligero interés comenzaba a

un informe detallado antes de la reunión. No quiero que se qued

bservaba cómo trabajaba, su mirada fija en sus movimientos. Había algo en ella que lo atraía, pero a la vez lo incomodaba. E

ró en la oficina con un

está el archivo que necesitabas sobre la expansión de la

peles, se giró ligeramente hacia Clar

r trabajar aquí. -dijo, exten

que denotaba una ligera curiosidad. Parecía que estaba evaluando

tmo de trabajo aquí. No todos son tan... flexibles. -dijo Clar

cómo Elisa se desenvolvía con naturalidad en el entorno. Aunque su vida había estado dominada por el control absolut

rumpiendo la conversación. Álex lo

3:00. Asegúrate de que todos los asistentes estén listos, y que todo esté preparado. As

? -preguntó ella, ya de

u actitud. La forma en que le respondía, si

, y luego se giró hacia los

mpañeros la miraban con interés. La nueva asistente de Álex Martínez no era como las demás. Su forma

a que esa oportunidad, de estar tan cerca de Álex, era la clave para lo