ánto tie
o quizá
a una niebl
erta del cortijo
del sol
aptores, volviendo p
no lo
en la habitación
en seco
una máscara de
rror en
manos temblando mientras roz
abela... ¿Qué
estab
", su
ó, con
Qu
odrilo no funcionan
rota, escapó
tas de t
angustia tan real
es dije que te asustara
, suplicó, y por primera vez, vi
rev
ospital privado, e
o se separó
llí, sentado en una s
ía, no
on una expresión
aparecieron ojeras o
a un f
ar, una y otra vez,
é no me
a tu lado. ¿Por qu
morir antes
necía en
satisfacción d
o era mi n
eñalé con la barbilla el teléfono barato que Alejandro h
mi mirada,
areció e
el tel
exa
ó ence
ería estaba muerta. O
es, lo
s se det
ía estar la tarjeta
ozo de pap
. Lo de
erdón,
era de uno d
o se que
o cayó de
é es esto?"
primera ve
a un graz
pieras que no podía llama
orror crecien
ensaje. Un regal
espeluznante, cómo sus
que el "Señorito" q
ado el teléfono co
a completamente indefen
tad, como si le hubieran dad
fue algo entre un s
cara con
a con espasmos de c
de emociones que n
iré, im
rga sonrisa se di
e, Halcón
una milésima parte
los
er su arrep
o poco, dema
me devolvía
ba la hu
volvía m
ía su c
a que desa