avi, empecé a rec
os, a in
o taller, buscando pie
riginal, la que Ma
sería
de mi nue
animó a volver
ofi. No dejes que
ovisado en una habitación de
ví a
ao de Javi, cuando est
ado era una
enció de participar en
de montaña cerrad
so. Imp
que nec
mis venas mientras ac
a
co, pe
igos en un bar de ta
í viva
idé a Mateo, el mat
alidad sie
a, pidiendo otra
te
el bar co
Jav
que eran
en una mes
e vi
un poco, ob
cuché la vo
, cor
e haberme casado
zón se
esposa' son patéticos. Es como
vestida
me v
gancia natural de Isa
Siempr
a un puñal dire
. Solo escuchaba, c
rimas quemánd
mi esc
mesa, temblando
at
sorprendid
¿qué hac
lo que
ro se e
asunt
? ¡Soy tu esposa! ¡La
del bar n
," dije, mi voz firme a pe
aguan
evantó,
as estu
garrarme
apa
o matrimonio fue un error.
í del bar, dejando at
r me
, esp
lle, las lágrimas
Javi? ¿Sabías
ió, con
. Intenté hablar
impo
as lágrima
ero salir
oche,
í m
r. Para aho
sola, perdiendo la
s brazos fuerte
te
estás haciendo?
buceé, demasiado bor
tró fuer
ciendo el
ó en su
ecto, empecé a
teo?" sollocé. "Yo solo... s
dijo
el volante c
a la hacienda, m
azos, como si
ala de
a la
sitó en
era enorme, os
í, confundid
la chaqueta,
borde de la c
mirada... ¿deseo?
Sofía?" preguntó, su
empeñas en
incorp
ción daba
yendo. Estoy... est
acer
aba a centíme
l en su aliento, mez
ermosa," susurró
veinte años que aún lo amab
o, la que había sido humill
," dije, con
una sonri
seduciendo? ¿Crees
volvió frí
Sofía. Y sigues s
el div
te lo he
linó s
ado deber cony
s me helaro
teo. Po
lo, pero era de
on dureza,
un beso
de posesión.
tiendo cómo las lág
no er
a... ot
o que me romp
, se levantó y
su cama, sintién
uqué, te
ue no me qued
nte, desperté sola
a por la ventana, bur
o es
como si nada h
margo de la humillación