trella de la lucha libre, se había entregado por c
ía su todo, la arquitecta
a "relajarlo" antes de su gran pelea,
o idílico se
clínica clandestina olorosa a anti
d: ¡su riñón había sido extirpado para salvar a Ricardo, el vago músico por quien Isabella
a lo golpeaba más fuerte qu
acén de órganos", un peón
proteger a su amante, lo exhibía en galas como
ión" era una nueva humillaci
egamente a una mujer c
un veneno que corría por sus venas, convirtiendo
rabia luchaban por
nació una determin
la como prueba irrefutable, Alejandro, e
último adiós a su infierno, se dirigió a Guada
r" verdadero curar h